El Concejo Deliberante se pronunció este jueves contra la resolución del gobierno bonaerense que modificó la distribución de los Equipos de Orientación Escolar (EOE).

Lo curioso fue que la decisión la impulsó un concejal del interbloque oficialista Cambiemos, el radical Mario Rodríguez, presidente del comité local de la UCR. La apoyó también el presidente del cuerpo, Guillermo Sáenz Saralegui (Agrupación Atlántica/Cambiemos) y los bloques opositores. En cambio, otros oficialistas optaron por abstenerse (fue el caso de la radical Cristina Coria) o votar en contra, como el resto del bloque de la Agrupación Atlántica, la concejala de la Coalición Cívica Angélica González, Alejandro Carrancio (Crear/Cambiemos) y el radical Ariel Martínez Bordaisco.

Pero los que se llevaron todas las miradas fueron Guillermo Arroyo y Mauricio Loria, de la Agrupación Atlántica, el bloque afín al intendente Carlos Arroyo. Es que se retiraron del recinto cuando hacía uso de la palabra una trabajadora social. Sucedió luego de que la licenciada en Servicio Social Silvana Colarieti, que estaba explicando la importancia de los EOE, les reprochara su falta de atención. “Cuando uno habla el otro se calla”, les espetó. De inmediato, los concejales se pararon y se fueron.

La resolución ya había sido votada en la semana en la comisión de Educación, una de las pocas en que el oficialismo no tiene mayoría.

La resolución en cuestión es la 1736 de este año. Además del pronunciamiento en contra, el Concejo aprobó por unanimidad dos pedidos de informes sobre el alcance de la medida.

Rodríguez aseguró que se trató de una “decisión lamentablemente errónea” tomada por “el área educativa de la provincia de Buenos Aires”. “La medida atenta contra el desarrollo de la educación”, lanzó el radical. Y agregó: “Los equipos trabajan en el territorio con los sectores más vulnerables. Es un enorme error el que se ha producido”.

El bloque de Unidad Ciudadana disintió en los argumentos: no lo consideró un error, sino una política que se inscribe en lo que Marina Santoro llamó “el vaciamiento sistemático de la educación pública”.

Su compañera de bloque Verónica Lagos recordó “una serie de embestidas contra la educación pública”, entre las que mencionó la frase de la gobernadora María Eugenia Vidal sobre los pobres que llegan a la universidad pública, el cierre de bachilleratos para adultos y la intervención del Consejo Escolar. “Exigimos la derogación de la resolución, es anticonstitucional”, acotó.

A los cuestionamientos se sumó Ariel Ciano (Frente Renovador), mientras que la jefa del bloque de Acción Marplatense, Claudia Rodríguez, volvió sobre la ausencia de los principales referentes del bloque del intendente. “Son los que tendrían que gestionar una posible solución”, lamentó. También recordó que Arroyo, en su campaña, hacía hincapié una y otra vez en su pasado de director de escuela y en la importancia de la educación pública de calidad.

Antes de votar, Mario Rodríguez volvió a pedir la palabra para solicitar “sensibilidad social” a sus pares. Cuando la mayoría del oficialismo aclaraba que votaba en contra, el presidente del Concejo hizo lo contrario: anunció que se pronunciaba a favor.  

El debate fue seguido desde la barra del recinto por dirigentes gremiales de Suteba y Udocba, que antes de irse celebraron el rechazo a la resolución con cánticos en defensa de la escuela pública y los equipos de orientación.