Facundo Moyano repite que es “apresurado” y hasta “irresponsable” hablar de las elecciones del año que viene. Pero en medio de fuertes críticas al rumbo político y económico del Gobierno nacional, admite que “se trabaja para la unidad” y revela una expresión de deseo: “Espero que tengamos la madurez necesaria para plantear con más fuerza los problemas de los argentinos”.

El diputado nacional del Frente Renovador estuvo en Mar del Plata el fin de semana y no dejó pasar la oportunidad de manifestar su crítica al Gobierno. Aseguró que “no da ninguna señal positiva”, y destacó que “no ha sabido resolver ninguno de los problemas que dijo que iba a solucionar”. Tras interiorizarse del conflicto de los trabajadores de la confitería Boston, el diputado se mostró preocupado por los despidos “tanto en el sector privado como en el público”.

En dialogo con LA CAPITAl, Moyano, también se refirió a la posición actual del sindicalismo. “Ha demostrado unidad en la acción y eso es fundamental”, subrayó.

En referencia a la situación del país en general, el ex presidente del club Alvarado consideró que “tiene que ver con responsabilidades de gobierno por las medidas económicas que toma y con el proyecto político que tienen”.

“Se ha negociado con la mayoría de las organizaciones sindicales un 15% y la inflación va a estar en 30% o más. Entonces, es por dos lados donde se ven afectado los trabajadores: la pérdida de poder adquisitivo y la pérdida de los puestos de trabajo”, profundizó.

La situación de los despidos fue otro de los temas en los que focalizó con preocupación el diputado marplatense.
“Estuve con los trabajadores de Télam, y no hay que analizarlo como una situación aislada sino que es lo que se está dando en muchas dependencias del Estado. Lo vimos también en el INTI. El Gobierno, ahora con la excusa de la ideologización y la politización, está tomando medidas en muchas dependencias para abaratar el costo del Estado que para ellos es un gasto. Y lamentablemente la repercusión que tienen son los despidos que se están viendo no sólo en el sector público sino en la actividad privada”, opinó.

-El presente es complicado y según lo expresado por el Gobierno, el panorama para los meses que vienen no es alentador.

-Es un gobierno que no da ninguna señal positiva ni de certidumbre. Se pelea con la oposición, le echa la culpa, se pelea con el 100% del sindicalismo, se pelea con las empresas, las culpa de la corrida cambiaria. La realidad es que no ha sabido resolver ninguno de los problema que dijo que iba a solucionar. Inclusive, manifestando en muchos casos que no iba a ser ningún problema manejar la inflación, que no iban a devaluar, que el dólar no iba a ser un problema, que iban a unir a los argentinos. Todos esos puntos los han profundizado. La sociedad está cada vez más dividida, hay más inflación, el dólar se devaluó más de un 50%. No sabemos cómo van a hacer para frenar el dólar ¿Cómo se puede planificar una sociedad en la que el dólar un día está a 27 y otro a 30? El Gobierno no da ninguna señal de certidumbre y es algo que nos preocupa a todos. Porque más allá de que nosotros estamos en la oposición, queremos que al país le vaya bien. Por supuesto que la ciudadanía nos votó para ser oposición y tenemos que criticar y proponer. Esta situación no le sirve a nadie. Queremos que el Gobierno se despierte y empiece a dar señales de que sabe lo que está pasando en la Argentina.

-Ante esta situación, ¿se puede pensar en la unidad del movimiento obrero?

-Yo creo que la unidad pasa a un segundo plano. El sindicalismo ha demostrado unidad en la acción y eso es fundamental. El paro general que se realizó hace dos semanas significó que el Gobierno reconociera que se tenían que reabrir las paritarias. Muchas veces, la gente dice que las huelgas generales no sirven de nada. Si con una inflación proyectada del 30%, los sindicatos firmaban por un 15%, tenían una pérdida importante del poder adquisitivo. El reclamo de los trabajadores sirve y en este caso sirvió. Por eso el Gobierno tomó cartas en el asunto.

-¿Ves posible la unidad de la oposición de cara a las elecciones 2019?

-Lo único que espero es que se empiecen a solucionar los problemas. Me parece que hablar de elecciones a más de un año es hasta irresponsable. Se está trabajando para la unidad de la oposición que, en su gran mayoría, es peronista y me parece que en ese sentido, tiene que haber una oposición consolidada que es lo que exige la sociedad. Como oposición, tenemos que empezar a dar el ejemplo de que tenemos capacidad de tener una agenda compartida y plantearle al Gobierno puntos para que empiece a prestarle atención y corregir el rumbo económico que le está trayendo un montón de perjuicios a la gente.

-¿El escenario ideal sería una gran interna con todos los sectores del peronismo?

-Me parece que es muy apresurado hablar de la cuestión electoral. La gente no está preocupada por eso, sino porque se le solucionen los problemas. Cuando venga la elección, seguramente vamos a saber qué hacer. Espero que como oposición tengamos la madurez necesaria para plantear con más fuerza los problemas de los argentinos.

-¿Qué impacto en lo social pueden tener los efectos de la devaluación en los próximos meses?

-Los efectos de la devaluación se están empezando a ver. La devaluación del peso es de un 50% en lo que va del año y eso tiene un efecto en el salario y la verdad es que si no empiezan a poner dinero en el bolsillo de los trabajadores, difícilmente se salga de esto. Porque las cosas se solucionan por abajo y abajo está la gente, los laburantes, el ciudadano de a pie, esté o no sindicalizado, esté o no trabajando en blanco. Son los de abajo los que sostienen el consumo y el Gobierno miró para otro lado a la hora de solucionar los problemas. Creyó que bajando retenciones a las mineras o sacando retenciones al campo, que si bien era una promesa de todos lo candidatos se tiene que hacer en forma progresiva, iba a solucionar todo. Más, cuando estás matando el consumo y el desarrollo de la industria nacional con la apertura de las importaciones. Ahí el Gobierno se equivocó.

La realidad de Mar del Plata

Facundo Moyano también se refirió a la situación actual de Mar del Plata y consideró que se viene “una realidad que duele”. “Somos los número 1 en pobreza, en desocupación, en inseguridad. Lamentablemente los record de Mar del Plata son pésimos y esa realidad también duele. Esta realidad que se traduce con los trabajadores de la Boston, es la realidad de la ciudad”, remarcó el diputado nacional.