Sin lugar a dudas que los tiempos han cambiado y seguramente será difícil que se puedan crear figuras heroicas como la del general Belgrano. Sin embargo, bajo el simbolismo de contar con una nación mejor, el secretario de Gobierno, Ricardo Stoppani, se animó al llamado a los vecinos para que puedan comprometerse y emular a los patriotas como Manuel Belgrano, José de San Martín o Mariano Moreno.

Será un compromiso muy grande la convocatoria en tiempos en que no se puede juntar gente para una cooperadora? Sin embargo, queda claro que si en algún momento otros pudieron porque no que se pueda lograr hoy.

El funcionario también recordó que la ciudadanía quedó en falta con esos próceres que no se quedaron en sus zonas de confort y fueron en busca de liberar al pueblo de la opresión del enemigo arriesgando su vida en más de una oportunidad. Y fue porque rememoró como fueron los últimos momentos de estos que hoy recordamos en cada acto oficial. Y parece ser que ya en aquellos tiempos se usaba el exilio y el olvido como una medida condenatoria. Así como Jesús murió en una cruz castigado, los argentinos que más hicieron para que viviéramos en un presente de libertad también padecieron la injusticia de un pueblo que no supo valorar esas proesas.

La pregunta que quedó en medio del acto oficial por el “Día de la bandera” es quien de los dirigentes actuales podrá erigirse con la capacidad y el reconocimiento para que el pueblo lo siga.

De esta manera, se recordó al creador de la bandera, don Manuel del Corazón de Jesús Belgrano, en una mañana soleada durante el acto oficial en la rotonda de plaza Libertad.

En nuestra historia,  la creación de la bandera nacional fue un hito importantísimo por la permanencia como símbolo de solidaridad y libertad por sobre todas las cosas y la representación  de los ideales de aquellos patriotas de mayo. Es al mismo tiempo un recordatorio de nuestros objetivos como nación, para lo cual es sumamente necesario revelar los actos de dependencia a otras naciones  luchando contra la idea de que lo de afuera siempre es mejor,  valorando lo nuestro, a nuestra gente, nuestra cultura y nuestras fuentes de producción nacional, pensando en el otro, en las necesidades de nuestros compatriotas, sin claudicar nunca.