Incendian una casa en el barrio Libertad y lo relacionan con un reciente crimen
Sucedió en Canadá al 1000 y se sospecha de que los causantes fueron allegados al joven Juan Olea (20), cuyo cadáver apareció tirado frente a la vivienda que ahora destruyó el fuego.
Vivienda destruida por el fuego en Canadá al 1000.
Una vivienda del barrio Libertad fue incendiada de manera intencional por un grupo de personas que acusó a los ocupantes de haber participado días atrás en el homicidio de Juan Andrés Olea (20).
El incidente, por el cual no se produjeron heridos pero sí algunos daños materiales, ocurrió esta mañana en una casa de Canada y Balcarce, a pocos metros donde el pasado el lunes último fue asesinado Olea, presumiblemente en el marco de una disputa por consumo de drogas.
Personal de la comisaría sexta y bomberos del cuartel Monolito acudieron tras los llamados de emergencia y se encontraron con una vivienda alcanzada por las llamas de un incendio. Al cabo de varios minutos el fuego se pudo sofocar y se reportaron daños materiales totales pero no víctimas.
Según trascendió la casa estaba tomada por algunas personas entre las cuales había jóvenes a los que los allegados a Olea acusaban de haber cometido el homicidio.
El fiscal Fernando Castro, que lleva adelante la investigación por el crimen, aseguró que no hay información volcada a la causa al respecto y que solo se limitó esa sospecha a los dichos “sin respaldo en pruebas” de la gente cercana a la víctima.
Precisamente, algunas personas próximas a Olea habían advertido días atrás que tomarían revancha y que iban a prender fuego las casas de los que creían responsables de la muerte. Frente a este desenlace se inició una investigación para tratar de esclarecer el hecho, a la vez que se ordenó una custodia en el barrio El Martillo para una vivienda, también amenazada por las mismas personas.
La incriminación parte de la idea que los familiares de Olea se formaron a partir de que el cadáver apareció a poca distancia de la casa de Canadá al 1000. Debido a que se trata de un domicilio usurpado la asociación fue inmediata y sindicaron desde un principio a los jóvenes ocupantes.
Olea fue muerto a golpes en la madrugada del lunes y su cuerpo quedó tendido sobre la calle Canadá. Los forenses establecieron que Olea, un joven con gran cantidad de antecedentes penales, había sido golpeado con un fierro o elemento similar en la cabeza.
Pese al esfuerzo de la fiscalía y la comisaría de juridicción, no se logró una evolución importante hacia el esclarecimiento, en gran parte porque no hubo testigos y si los hubo no quieren cooperar.