Por Gastón Benoffi

Mar del Plata tendrá el próximo domingo una nueva edición de “La Carrera de Miguel” en el tradicional circuito costero.
Será el tercer año consecutivo que se desarrolla en esta ciudad, tras la sanción de una ordenanza que la instituye, luego de haber existido registros esporádicos en Parque Camet y Batán.

Esta carrera es diferente a todas las que pueden verse semana a semana. Los atletas que se suman no lo hacen por el orgullo deportivo de cruzar la meta sino por mantener viva la memoria de un joven militante de los 70’ que empezó a escribir su historia en el atletismo.

La dictadura cívico-militar, que había irrumpido en este país el 24 de marzo de 1976, impidió que esto suceda, haciéndolo desaparecer el 8 de enero de 1978, al igual que muchos deportistas como un plan sistemático tenebroso que se llevó la vida de 30 mil argentinos y argentinas.

Desde entonces, la historia de Miguel Sánchez se mantuvo oculta, sin ver la luz. Sus participaciones en la Carrera de San Silvestre de San Pablo, Brasil, hablan de un joven que se trazó objetivos ambiciosos. Unos años antes, Osvaldo Suárez, había marcado un precedente en territorio brasileño al haber conseguido la medalla dorada en tres ocasiones consecutivas.

Sanchez, entre competencias y entrenamientos, cumplía un rol social en los barrios desde su activa militancia política en la Juventud Peronista y con un modesto trabajo en la casa central del Banco Provincia de Capital Federal, a donde había llegado con apenas 17 años con una valija repleta de sueños.

El 8 de enero de 1998 se cumplieron 20 años de su desaparición y los periodistas Ariel Scher y Víctor Pocha rescataron su pasado en un artículo periodístico del diario Clarín. Sin proponérselo, llegó a manos de Victor Picconi, integrante por aquel entonces de la redacción de La Gazzeta dello Sport. El italiano se conmovió y se llevó el nombre de Miguel a su país donde colocó el primer eslabón de un acontecimiento deportivo que actualmente se realiza en todo el mundo, luego de haber publicado el libro “La Corsa di Miguel”.

Con una breve pero rotunda consigna “No al olvido”, un grupo de más 300 atletas italianos corrieron por las calles de Roma el 9 de enero del año 2000. Esa fue la primera vez que se recordó a Miguel Sánchez, a miles y miles de kilómetros de su Tucumán natal y de donde soñó con un país mejor para sus familiares y amigos.

Organizada por el Club Atlético Central, en colaboración con el Departamento de la política deportiva de la ciudad de Roma, la carrera contó con la presencia de la hermana de Miguel, Elvira Sánchez, quien le entregó en mano la copa a los triunfadores Josep Saturlino y Simona Perilli.

Al transcurrir los años, “La Corsa di Miguel” fue tomando protagonismo en el circuito europeo. Tuvo sus variantes, de recorridos y ganadores. Y con algunas “perlitas” que se pueden leer y conocer en portales italianos. Con sol, o con lluvia, con más o menos kilómetros, el espíritu siempre se mantuvo: revitalizar el rostro de Miguel Sánchez, como homenaje a quien vivió por el deporte y el bienestar de sus pares.

En la última edición, las calles romanas recibieron a más de 5000 mil atletas provenientes de diferentes países. Se han sumado deportistas olímpicos de otras disciplinas, lejanas al atletismo, pero cercanos al hecho de recordar a Sánchez.

Con el correr de las ediciones, el estadio Olímpico, se convirtió en uno de los sellos distintivos de la carrera junto con el característico del Estadio dei Marmi “Piero Mennea”.

Proveniente de Italia, “La Corsa di Miguel” llegó a nuestro país el 11 de marzo de 2001. “La Carrera de Miguel” se realizó en Capital Federal en modalidades de 5 y 9 km y su principal promotora fue nuevamente Elvira. Con este acto reparador, la cara de Miguel empezó a recorrer las calles de ciudades argentinas y su nombre empezó a resonar en cada 24 marzo como el de las 30 mil personas detenidas-desaparecidas entre 1976 y 1983.

En Mar del Plata los precursores de esta carrera fueron el recordado periodista y atleta Victor Maraude, junto a Eve Navone con el acompañamiento de la Asociación Bancaria y la Agremiación Docente Universitaria. A pesar de este impulso, el acontecimiento se desarrolaba con escasísimos recursos.

Motivado para hacerla resurgir en la costa y en paralelo con el boom del “running”, el concejal de Unidad Ciudadana Marcos Gutiérrez elaboró un proyecto de ordenanza para instituirla en esta ciudad como parte de las actividades en torno al Día de la Memoria. A mediados del año 2014 se convirtió en una normativa modelo e involucra a diferentes organismos municipales y asociaciones para llevarla adelante.

El próximo domingo a las 9 Miguel Sánchez volverá a estar entre nosotros.