La Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP) presentó el Plan Estratégico 2030, una iniciativa que pretende elaborar una herramienta de gestión que determine los lineamientos esenciales para el desarrollo de la institución. Prevén que el proyecto, que iniciará a desarrollarse esta semana, estará listo a fin de año, por lo que invitan a toda la comunidad a formar parte del proceso de debate y preparación.

Según señaló el rector de la casa de altos estudios, Alfredo Lazzereti, la medida busca “luchar contra la visión cortoplacista” y confeccionar una herramienta de gestión que posibilite determinar “objetivos, metas y programas concretos” que favorezcan al crecimiento de la universidad en la ciudad y la región del sudeste bonaerense.

“Si las medidas que tomamos hoy no tienen un horizonte de hacia dónde vamos, el desarrollo de la universidad se torna un poco impredecible y es llevado adelante no de una manera planificada, que es lo que queremos recuperar, sino por impulso y decisiones que no tienen una mirada que se engancha con el futuro”, señaló.

Pese a destacar la importancia que implicará contar con un documento que facilite a la gestión institucional, para Lazzereti una de las características más importantes del proyecto es que pondrá a la universidad “en debate”.

Él dijo: “Pensamos que la planificación estratégica y participativa, que es como la queremos nosotros, va a poner a la universidad en debate. Y no solo queremos poner a los integrantes de la universidad en un debate sobre lo que queremos hacer al futuro, queremos que sea una participación amplia”.

“Queremos que todo el mundo participe porque la única manera que un Plan Estratégico tenga la posibilidad de perdurar en el tiempo es que no sea decidido por una gestión, sino que sea decidido por una comunidad que lo haga propia y después, más allá de los matices que cada gestión le vaya a dar, podamos seguir caminando sobre esas grandes líneas de pensamiento”, agregó.

En la misma línea se pronunció la directora del Plan Estratégico, Mariana Foutel, quien fue la responsable de brindar los detalles de lo que será “un proceso de planificación estratégica y participativa” que se originará en el seno de la institución hacia la región de influencia.

“La esencia de esto es pensar un proceso abierto, plural y participativo. Nosotros pensamos que esto implica poder capitalizar la diversidad de ideas que tiene nuestra universidad, contribuyendo al desarrollo del sudeste bonaerense y siendo actores claves en este sentido”, señaló.

Detalles del proceso

En cuanto a los detalles de la ejecución del proyecto, Foutel indicó que el proceso de elaboración estará dividido en ocho comisiones que tratarán los ejes de trabajo a abordar. Éstos son: Académico, Investigación, Innovación, vinculación y transferencia tecnológica, Extensión y compromiso social, Comunicación, promoción cultural y relaciones con el medio, Bienestar de la comunidad universitaria, Gobierno y gestión y Espacios, infraestructura y equipamiento.

Cada una de las comisiones estará coordinada por un triunvirato que tiene como objetivo representar de manera equitativa a las distintas unidades académicas de gestión como pueden ser las nueve facultades, el Colegio Illia y la Escuela Superior de Medicina como también los diferentes espacios políticos que tienen presencia en la institución.

Foutel aseguró que la idea es que los coordinadores propuestos por cada unidad académica orienten el debate “desde una escucha democrática y fomentando la participación en las comisiones, que serán abiertas y no contarán con un número máximo de miembros”.

En este sentido, Foutel instó a que tanto alumnos, docentes, graduados como el personal universitario se sientan convocados, en primera instancia, a participar del diagnóstico y luego, a participar de la generación de propuestas para “poder construir una mirada con horizonte 2030”.

Lazzereti insistió que el objetivo es “escuchar qué piensan de la universidad la comunidad, los actores sociales, políticos y del mundo de la producción y el trabajo, quienes son quienes contribuyen a financiarla con el pago de sus impuestos”.

Y aseguró: “Lo que surja de estas discusiones, que pensamos que van a terminar por septiembre, es que también nos quede a nosotros, los que nos toca gestionar, una herramienta de gestión. Ese gran plan después lo vamos a bajar a objetivos, metas y programas concretos que sean cuantificables y mensurables en el tiempo”.