Carlos Castillo, el padre del novio de la Jimena Celaya, la joven tucumana que perdió una pierna al ser atropellada en Cabo Corrientes, lamentó la actitud del policía que conducía el automóvil que provocó el accidente ocurrido el martes pasado, al quien le reprochó no haber asistido a su nuera ni haber mantenido aún ninguna clase de contacto con su familia.

En diálogo con María Delia Sebastiani a través de LU6, Castillo explicó que tras el accidente, decidió trasladarse a Mar del Plata para acompañar a la joven y a su hijo, quienes de momento, no recibieron ninguna clase de asistencia más allá de la provista por el personal del Hospital Interzonal General de Agudos.

“Lamento que nadie se acercó, excepto los medios y gente del hospital. Ayer fui a la comisaría novena y me niegan los datos. Queremos tener una idea de lo que sucedió”, dijo al programa radial.

El hombre reprochó la conducta de Rubén Villamayor López, un agente de Infantería que participaba del Operativo Sol, quien ahora se encuentra desafectado de la fuerza y detenido en la Unidad Penal de Batán.

“Le quiero dar un mensaje a este muchacho: que entienda que la Policía no es un trabajo” es “un sacerdocio” porque “él no trabaja en la policía sino que es policía, por lo que tiene que mantener el decoro tanto en su vida privada como en su vida pública”, sostuvo. “A este muchacho no lo conocemos. No lo conocen ni mi nuera ni mi hijo, porque jamás se acercó a asistirlos ni en el momento del accidente” y “ni siquiera se comunicó” después, agregó.

El accidente por el que Villamayor López de encuentra acusado ocurrió a las 7.05 del martes en la curva de Cabo Corrientes, cuando el automóvil que conducía a alta velocidad impactó contra otro estacionado. Este segundo vehículo subió a la vereda por el impulso y allí embistió a Celaya, quien caminaba con su novio.