Tras llegar un acuerdo con el municipio, los cooperativistas que se manifestaban frente al municipio levantaron este jueves el acampe que habían iniciado el martes.

El conflicto se había iniciado por una deuda que el municipio mantiene con los cooperativistas por el pago de un avance de obra en la construcción de viviendas y ayer, tras una extensa reunión, se llegó a un principio de acuerdo.
Según contó el coordinador de Barrios de Pie, Rodrigo Hernández, el ejecutivo reconoció la deuda y se comprometió a saldarla en cuotas que se abonarán todos los viernes.

“No es una solución total pero lo tomamos como un triunfo parcial”, le dijo Hernández a LA CAPITAL, luego de la reunión de cuatro horas que mantuvieron los manifestantes con el director general de la Secretaría Privada, Hernán Tillou y el secretario de Planeamiento Urbano, Guillermo De Paz.

“No nos van a pagar la totalidad pero hasta que llegue la certificación, nos van a pagar un monto todos los viernes asi podemos avanzar”, contó.

El conflicto abarca a unos 100 cooperativistas de Barrios de Pie y la Cetep y se remite a un plan de viviendas en el barrio Santa Rosa del Mar. Según explicó Hernández, hay 56 viviendas planificadas pero sólo pudieron concretar 34, debido a que el municipio no hizo un trabajo de nivelación en los terrenos. Respecto a esto, que era otro de los motivos del reclamo, el referente de Barrios de Pie destacó que “el lunes quedaron comprometidos a ir a la obra a ver si pueden solucionar al menos parcialmente la puesta a punto y la nivelación de los terrenos que faltan”.

Por su parte, desde el ejecutivo admitieron que hay una demora en los pagos pero confirmaron que se llegó a un acuerdo con los manifestantes. “Estamos en el proceso de certificación que es un trámite administrativo que depende de Nación, pero hay un compromiso de pago y se llegó a un acuerdo”, señaló Guillermo De Paz.

El dinero que el municipio debe pagarle a los cooperativistas proviene de fondos de Nación y representan alrededor de un 1 millón de pesos.

Los cooperativistas habían iniciado la protesta el miércoles a la tarde luego de no tener respuestas por parte del municipio.

“Hemos hablado decenas de veces en estos últimos 50 días con el municipio, pero realmente se han puesto a trabajar desde que empezamos a cortar. El mensaje que nos envía el municipio es que si no cortamos no nos van a atender y nadie se va a poner a gestionar”, había anticipado el Hernández. Y acotó: “Me sonó mucho más el teléfono todo el día de ayer que en los últimos 50 días, cuando venía a pedir casi por favor que nos atiendan”.

Respecto al conflicto en sí, Hernández relató que “el 17 de febrero que certificamos el avance de obra de las 56 viviendas que estamos construyendo en el barrio santa Rosa del Mar”.

“Ya han pasado la fecha límite que ellos ponen para el pago, estamos a cerca de 50 días que certificamos y lamentablemente no hemos recibido el pago”, explicó.

La protesta que finalizó ayer no tiene relación con el acampe que que realizaron cooperativas y movimientos sociales durante 23 días y que se levantó la semana pasada.