Vecinos de los barrios La Trinidad y El Sosiego pidieron que la Justicia determine el origen de tres cavas generadas por la extracción de grandes cantidades de tierra y de tosca, que aparentemente, fueron utilizadas para realizar el basamento de una obra en construcción ubicada en la Autovía 2.

“Ya hicimos una denuncia penal el pasado 8 de marzo pero lamentablemente no ha habido demasiado resultados. Por esa razón también pedimos la intervención del Concejo Deliberante“, le explicó a LA CAPITAL la vecina Sandra Gallasso, quien en su condición de abogada, promovió una demanda pidiendo que se establezca quiénes fueron los autores de las excavaciones y que se determine en qué condiciones se desarrollaron esos trabajos.

Este miércoles los vecinos recibieron la visita de la concejal de 1País, Mercedes Morro, y del concejal de Acción Marplatense y presidente de la comisión de Medio Ambiente del Concejo Deliberante, Marcelo Fernández, quienes acudieron al lugar para interiorizarse sobre la situación.

Según Gallasso, la primera de las cavas comenzó a originarse en el mes de febrero y fue descubierta por los vecinos ante el inusual movimiento de camiones registrado sobre la calle que comunica a la Autovía 2 con el interior del barrio La Trinidad.

“En ese momento los vecinos empezamos a seguir a esos camiones y descubrimos que salían desde una excavación que se estaba haciendo en la intersección de la calle 6 y 13 con dirección a una obra ubicada en la Autovía 2, a unos 5 kilómetros de distancia, donde una empresa está construyendo un depósito”, dijo Gallasso.

Los vecinos determinaron que esa cava terminó adquiriendo una profundidad cercana a los 8 metros y una dimensión de 15 metros de ancho por 80 de largo.

Ante los primeros reclamos, a mediados de febrero el tema llegó a conocimiento de las autoridades por lo que se produjo una actuación de la que participaron Defensa Civil, la Delegación Municipal Norte, la Dirección de Minería y Policía Ecológica.

Gallasso recordó que en aquél momento se hizo pública la noticia de que la cava “era clandestina y de que había sido clausurada”.

Sin embargo los trabajos de extracción de tierra prosiguieron, esta vez, en otros dos sectores de la zona.

“Ahora tenemos dos cavas nuevas, más pequeñas, que se hicieron con la misma metodología, lo que habla de que la inacción de la Delegación Municipal Norte para controlar este tema ha sido importante“, explicó.

Gallasso sostuvo que a pesar de los reclamos realizados por los vecinos, hasta el momento el municipio no aportó ninguna información concreta sobre las condiciones en las que fueron realizados estos trabajos.

“Imaginamos que las dependencias municipales deberían estar al tanto de esta situación, pero lamentablemente no hemos tenido acceso a alguna documentación”, indicó.

La mujer destacó la preocupación que existe en el barrio por el riesgo que representa la presencia de estas tres excavaciones.

“Nos inquieta que haya accidentes, que se arroje basura y que se contaminen las napas, porque en esta zona se ubican los pozos desde los cuales Obras Sanitarias extraer el agua para buena parte de la ciudad”, alertó.