Huracán se clasificó anoche para los octavos de final de la Copa Libertadores de América porque empató con Atlético Nacional de Medellín sin goles en el Estadio Atanasio Girardot, por la última fecha del Grupo 4 del máximo certamen del fútbol continental.
Los colombianos, quienes ganaron la zona invictos y de un modo brillante, en esta ocasión también fueron superiores y estuvieron cerca de convertir, pero Huracán los esperó con orden y el espíritu que lo caracteriza, y además estuvo atento a la posibilidad de acertar algún contraataque, valiéndose de su temible goleador Ramón Abila.
Con este resultado, todo parece indicar que Atlético y Huracán volverán a enfrentarse a partir de la semana próxima ya en el marco de los octavos de final, midiéndose primero en el Estadio Tomás Adolfo Ducó para afrontar el decisivo otra vez en Medellín.
A pesar de que reservó a varios de sus habituales titulares, el local igual dio muestras de su poderío, que se sustenta en un fútbol en el que se combinan estética, solidez, ambición y eficacia.
Seguro en el fondo, a tal extremo que terminó la segunda fase sin haber sufrido ni un solo gol, dominador y plástico en el medio, desbordante en el ataque, Atlético se manejó con comodidad en el primer tiempo y generó inclusive escenas como para haber alojado la pelota en el fondo de la red.
A los 30 minutos, a la salida de un lateral, Alejandro Guerra hizo pasar de largo a un adversario y disparó desde fuera del área, pero el balón pegó en la parte superior del travesaño y siguió su curso.
A los 39, Luis Carlos Ruiz enganchó hacia adentro y cuando iba a definir, desde el borde del área grande y en una posición frontal, lo encerraron entre tres oponentes y quien salvó la situación con su cruce fue Matías Fritzler.
A los 43, hubo chance para Huracán, porque desbordó Mariano González por la izquierda y mandó un centro para Wanchope Abila, pero salvó con un cabezazo de los más oportuno Dávinson Sánchez.
Poco antes de que concluyera el primer período, Macnelly Torres remató cruzado y rasante y Marcos Díaz respondio con eficacia al despejar hacia su derecha.
En la segunda parte el anfitrión siguió apostando a ganador, tal es el fútbol que siente y desarrolla, pero Huracán volvió a exhibir ese acorazado que protege su corazón y la fuerza inagotable que tiene como grupo le dio otra satisfacción más, la de pasar de ronda y continuar haciendo historia de la mejor para el club de Parque de los Patricios.
Así, Atlético se metió en octavos como uno de los principales candidatos para quedarse con la Copa y Huracán, cuyo plantel es el mismo que se recompuso tras el vuelco del micro en la proximidad del aeropuerto de Caracas, se dio otro gustazo, el de avanzar en el torneo más trascendente del continente a nivel clubes.