A días de que dé comienzo un nuevo ciclo lectivo, el flamante edificio de la Escuela de Artes y Oficios Digitales permanece sin tener un destino definido.

A pesar de ya fue otorgado el final de obra, el nuevo establecimiento ubicado en avenida Jorge Newbery y Nuestra Señora de Schoenstatt sigue abandonado, rodeado por pastizales y expuesto a ocasionales actos de vandalismo.

Por ese motivo la presidenta del bloque de concejales de Acción Marplatense, Claudia Rodríguez, reclamó que el municipio incorpore al edificio a su sistema educativo y que le asigne una partida presupuestaria para habilitarlo y ponerlo en funcionamiento. La obra, realizada entre los años 2015 y 2016, demandó una inversión de casi 21 millones de pesos, que fueron aportados por la Corporación Andina de Fomento (CAF).

Así el organismo internacional financió la creación de una nueva escuela pública que se diferenciaría de las ya existentes en la ciudad por ofrecer formación tecnológica.

El establecimiento fue concebido como una pieza clave dentro de un plan mucho más amplio elaborado por el municipio y el Plan Estatégico, lo tuvo el apoyo de la CAF y del Ministerio de Ciencia de la Nación.

El proyecto preveía construir el Parque Informático para fomentar la radicación de empresas del sector TIC y garantizar la presencia de nuevas sedes de las 5 universidades existentes en Mar del Plata.

La Escuela de Artes y Oficios Digitales cumpliría con la función de capacitar a adolescentes en disciplinas relacionadas con las industria del conocimiento y la informática. Así las empresas de un sector ávido de mano de obra dispondría de más jóvenes capacitados y listos para emplearse en el desarrollo de productos y servicios vinculados con la tecnología.

Sin embargo, ni bien asumió en el año 2015, el intendente Carlos Arroyo resolvió cancelar el programa. Ante las críticas recibidas, meses más tarde Arroyo improvisó un nuevo anuncio y habló de su interés por alentar la instalación de empresas TIC en torno a la estación ferroautomotora.

Mientras tanto, el edificio de la Escuela de Artes y Oficios Digitales ubicado frente al barrio privado Rumencó, quedó abandonado y expuesto a un progresivo deterioro. Según Rodríguez, el establecimiento, ya está listo para recibir a 1200 alumnos y cuenta con cinco aulas, tres talleres, biblioteca, sala de dirección y secretaria, sala de profesores, portería, salón de usos múltiples, cocina y patios cubiertos. No obstante, la Secretaría de Educación aún no lo incorporó a su sistema.

Según Rodríguez, la comuna ya debería haber cumplido con una serie de pasos administrativos para poner al lugar en funcionamiento y habilitar una escuela a la que, inicialmente, podrían asistir unos 500 alumnos de la zona sur.
“Para eso, además, el gobierno debe asignar presupuesto y empezar a realizar las designaciones de personal docente y no docente”, comentó la concejal. “Nos preocupa que esto no se haya hecho el año pasado y que tampoco se lo haya previsto para el ciclo lectivo que está por comenzar”, sostuvo.

Rodríguez señaló que más allá de que el proyecto original era el de establecer allí la Escuela de Artes y Oficios Digitales, lo cierto es que la comuna “ya cuenta dentro de su patrimonio” con un edificio dispuesto para atender la demanda educativa de una amplia zona del sur de Mar del Plata, cada vez más poblada y en la que resulta cada vez más necesario que haya servicios de enseñanza pública.