Un individuo de 23 años se encuentra en el Hospital Interzonal en grave estado producto de la puñalada que recibió de la dueña de un kiosco al que intentó asaltar en el barrio Santa Rita.
Según informaron fuentes extraoficiales de la policía local, el hecho se registró anoche en un comercio ubicado en la zona de San Salvador al 7900, donde un sujeto joven concurrió a pedir que le vendieran bebidas alcohólicas. Ante la negativa de la comerciante, que lo atendía a través de una reja, el cliente la tomó del cuello y la amenazó de muerte, al tiempo que le empezó a pedir dinero.
En ese momento la mujer de 38 años, armada con un cuchillo, le asestó una puñalada en el lado izquierdo del cuerpo. Esta situación puso en fuga al joven de 23 años, quien minutos más tarde llegó a la guardia del HIGA. El herido fue trasladado en el vehículo particular de su suegro y una vez atendido por los médicos se estableció que la lesión sufrida era de gravedad y debía ser intervenido quirúgicamente.
LA CAPITAL pudo saber que la fiscalía de Resolución Temprana de Conflictos inició actuaciones por “lesiones” pero le dio intervención a la fiscalía de turno, que decidió no tomar ninguna medida contra los comerciantes involucrados tras conocer los detalles de lo ocurrido.

Escudo humano

BUENOS AIRES.- Una mujer fue asaltada en su casa del barrio porteño de Villa Devoto por tres delincuentes que, al verse rodeados por la policía, lograron con sus amenazas llevarse cautiva a la víctima como escudo humano en una camioneta 4×4 hasta que la liberaron sana y salva en Belgrano.
El hecho comenzó cerca de las 2 de la madrugada en una vivienda de la calle Andrés Vallejos al 3700, del barrio de Villa Devoto.
La dueña de casa, una mujer de 63 años, estaba durmiendo cuando fue sorprendida en su cuarto por delincuentes que en forma violenta la despertaron, la amenazaron con armas y le aplicaron un culatazo en la frente para que les entregara todos los objetos de valor que tuviera.
Una fuente policial explicó que “todavía no se sabe cómo entraron a la casa, pero los delincuentes ya le habían dado vuelta casi todos los cajones y le exigieron más dinero y joyas”, por lo que la víctima les entregó 6.000 pesos y algunas alhajas.
Un vecino que advirtió la presencia de los ladrones en la casa de su vecina fue quien llamó al 911 y de inmediato varios patrulleros de la comisaría 45 de la Policía Federal de la ciudad, con jurisdicción en la zona, llegaron al lugar y rodearon la manzana.
“Se aplicó el protocolo típico para una toma de rehenes y se hizo un cerrojo cerrando toda la manzana”, dijo un jefe policial que participó del operativo.
Mientras se aguardaba la llegada de los especialistas del Grupo Especial de Operaciones Federales (Geof), uno de los subcomisarios de la comisaría 45 asumió el rol de negociador con los delincuentes.
Las fuentes explicaron que la propia mujer, con señas, les avisó a los policías que los delincuentes eran tres y que estaban armados.
Como la casa de la víctima se comunicaba con la de su hija, los ladrones tomaron la decisión de robar la camioneta Dodge Journey del yerno y huir con la mujer como escudo humano.
“Le hicieron abrir el portón a la propia mujer y la subieron a la camioneta. No hubo otra opción que dejarlos salir, tenían los vidrios polarizados y no podíamos hacer ni un disparo. Por protocolo, priorizamos la vida de la víctima”, aseguró uno de los jefes del operativo.
La policía inició una persecución a distancia con la premisa de no abrir fuego para resguardar a la víctima, pero le camioneta Dodge tomó por avenida General Paz, se marchó a toda velocidad y logró eludir el operativo.
La víctima contó después que, primero, uno los ladrones se bajó en el barrio Mitre y que luego los otros dos delincuentes la liberaron en la esquina de Echeverría y Freire, a metros de la estación ferroviaria de Belgrano R.