Las necesidades financieras del gobierno municipal llevaron la semana pasada al interbloque oficialista Cambiemos a ponerle punto final a la parálisis legislativa y aprobar el viernes, en sesión extraordinaria, la adhesión al Pacto Fiscal de la provincia. Fue la manera de asegurarse el giro de fondos bonaerense para sostener el funcionamiento del municipio.

Para lograrlo, los concejales conformaron un día antes las comisiones de Hacienda y Legislación, que avalaron la medida. Con ese dictamen, el camino quedó allanado: el oficialismo sólo necesitó mayoría simple para imponer el Pacto. De lo contrario hubiera necesitado lo casi imposible: reunir dos tercios de los votos para aprobarlo sobre tablas. Quiere decir que la definición de las comisiones de Legislación y Hacienda obedeció a un claro objetivo político del gobierno local. La sorpresa es que esta semana, cuando se suponía que debían empezar a funcionar el resto de las comisiones, el funcionamiento volvió a paralizarse.

¿Qué sucedió? “Todavía no están conformadas. Se están discutiendo las vicepresidencias”, coincidieron fuentes legislativas consultadas por LA CAPITAL.

Por el momento rige un acuerdo de palabra entre los presidentes de bloque sobre los presidentes de cada mesa de trabajo y la participación de las bancadas en las distintas comisiones. Así, por ejemplo, Cambiemos presidirá las más importantes (Legislación, Hacienda y Obras) y tendrá mayoría en casi todas (9 de 12).

Con ese consenso en vigencia, concejales de distintos bloques procuraron en el inicio de esta semana convocar a las primeras reuniones de sus comisiones. Pero se encontraron con una traba: faltaban acordar las vicepresidencias.
“Es algo insólito que se estén discutiendo los vicepresidentes, que no tienen ninguna tarea puntual dentro de las comisiones: sólo reemplazar al presidente cuando no está”, se quejan en Unidad Ciudadana.

Para que una comisión esté formalmente constituida se necesita algo más que el acuerdo político de los jefes de bloque. Los concejales deben reunirse, votar al presidente y definir días y horarios en los que se van a juntar. Es un formalismo (el presidente que se vota es el que ya fue consensuado), pero a la vez es un paso necesario. Y, por el momento, sólo se dio en las comisiones de Legislación y Hacienda ante la necesidad de aprobar el Pacto Fiscal.

Con todo, Hacienda tampoco se reunirá esta semana para abordar los asuntos que más le interesan a la administración: las ordenanzas fiscal e impositiva (que contienen el aumento de tasas) y el presupuesto. “No estamos convocando porque todavía falta definir el resto de las comisiones”, admitieron en el oficialismo. Así, podría considerarse que el apuro por la suba de tasas del municipio no parece tan marcado como el que hubo por el Pacto Fiscal de la provincia.

Las mesas de trabajo internas debieron ser redefinidas a partir de la renovación legislativa que se produjo el 10 de diciembre. Desde entonces sólo hubo una reunión de comisión (la conjunta de Legislación y Hacienda). En lo que va del verano también hubo tres sesiones extraordinarias: una para homenajear a los tripulantes del ARA San Juan, otra para abordar los inconvenientes del tratamiento de residuos y la del Pacto.

Antes de esa última sesión hubo una polémica: ante la demora en la conformación de comisiones, el presidente del Concejo Deliberante había firmado una treintena de decretos para acelerar algunos expedientes, entre ellos el de la adhesión a las pautas fiscales de la provincia, que luego fue anulado a pedido de concejales oficialistas y opositores y reemplazado por una ordenanza.