“Como dice Mano de Piedra Durán, viejo es el viento y aun sigue soplando”, apunta el promotor de boxeo Huber Calderón, al cumplir 53 años junto al deporte y apuntalando a los pibes que siguen surgiendo en Mar del Plata, ahora con su hijo Eber para compartir la tarea.

En charla con LA CAPITAL Huber Calderón dice que “hay en Mar del Plata una buena camada de jóvenes boxeadores, muy respetuosos”. “Siempre hay que enseñarles a respetar, al deporte, a los rivales, pero estos chicos aprenden bien, veo más educación en todos los gimnasios”.

Huber Calderón, alguna vez apodado como “el Don King marplatense”, destaca y agradece a todos quienes lo requieren como promotor para organizar festivales “como Jorge Alvarez o Baigorria en Dolores; Germán Nismer en General Guido; Argüelles en Benito Juárez; … en Mar de Ajó; Silvio Costas, Sorbello, Monzón, Mauricio y Ariel Dobal, Canibal… en Mar del Plata”.

Pero a la par de la tarea como promotor Huber es el representante de Matías y y el invicto Cochi Leiva, dos de los boxeadores más promisorios de nuestros lares. Eber, en tanto, en el mismo camino, es convocado para diferentes festivales y ultimamente se le ofreció ir a Mendoza para acompañar a Pablo Chacón, aunque prefirió por esta vez dejar atrás la invitación por el nacimiento de su hijo Joaquín. “Soy jóven, tengo tiempo, pero además no paramos en la actividad…En este caso quise acompañar con Florencia el nacimiento de nuestro hijo”, explicó Eber.
Es una familia de boxeo dedicada al boxeo. También Leandro Calderón acompaña en la tarea a Huber y Eber. Y Huber arrancó este año 2018 por primera vez en mucho tiempo acompañado de sus hermanos que llegaron desde distintos puntos del país, Daniel, Orlando y Cali.

“Siempre hay que agradecer a la familia por bancarnos y a todos los que nos apoyan en la promoción del boxeo, como Pablo y Martín, de Tienda León; Carlos Vecchio, del Instituto Vecchio; Carlos Suárez y Vaquero; el Sindicato de Pasteleros; a Sepromed, Servicios y Productos Médicos y el Sanatorio Belgrano; y también a la Federación Argentina de Boxeo, por la confianza permanente durante tantos años en nuestra tarea”, manifestó también Huber Calderón en diálogo con este medio.

“Hace muchos años que trabajo para la FAB, y eso será porque me porté bien, porque soy confiable, pero siempre uno tiene que ser agradecido, po ejemplo a Luis Romio, inspector de la FAB o al presidente de boxeadores profesionales, Roberto Rilo”, añadió Huber.

“Tanto para la promoción de espectáculos, además, como para la representación de boxeadores, recurren a nosotros por la confianza, por la trayectoria, porque mi viejo le dedica el mismo tiempo a un súper profesional que a un amateur, y a nosotros nos inculcó lo mismo, el respeto por igual a todos los deportistas”, expresó Eber.

Pero así como empezó la charla con su optimismo por la buena camada de boxeadores que se vienen en Mar del Plata, Huber Calderón manifestó lo malo del año que pasó en su actividad. “Lo malo es el escaso reconocimiento a esos avances, a esos progresos, no se destaca como se levantó el boxeo en Mar del Plata, sobretodo quienes tienen que recordarlo o premiarlo, no puede ser que una vez más el boxeo no haya sido incluído para la ternas de los Lobo de Mar”, remarcó Calderón.

“No es la primera vez que lo digo, este es un hecho que se repite, ni siquiera los periodistas del Círculo que tienen buena relación con nosotros se toman el trabajo de llamar y preguntar, hay muchísimas figuras promisorias en el boxeo, sobran nombres para ternas, y no reconocen que hasta hace un tiempo parecía una actividad con peligro de extinción en Mar del Plata y ahora, por nuestro esfuerzo, el de mucha gente, y el respeto, la conducta y el profesionalismo de muchos boxeadores, se ha levantado muchísimo en la ciudad”, afirmó finalmente Huber Calderón. El viento del boxeo vuelve a soplar en Mar del Plata. “Y yo también sigo soplando, como decía Mano de Piedra”, remata otra vez Huber con una sonrisa.