Los policías tienen que estar preparados para un sin número de eventualidades que pueden suceder cada día en las calles de la ciudad, desde prevenir delitos hasta asistir a las personas en las más disímiles situaciones; desde un turista perdido que no encuentra una calle hasta evitar que una persona mate a otra.

Esta mañana al 911 llegó un llamado para pedir ayuda por una de esas situaciones que nada tienen que ver con un delito: una mujer pedía ayuda urgente porque estaba en trabajo de parto en su casa en Vértiz y 224.

Inmediatamente, un patrullero de la comisaría undécima fue hasta el lugar y encontró a Rosano, que a sus 33 años estaba a punto de dar a luz.

Los minutos transcurrieron como si fuesen horas eternas, una nueva vida llegaba y la ambulancia demoraba en aparecer.

Ante esta situación, el sargento Sargento Matías Curuchet y la sargento Verónica Jara asistieron a Rosana para que pudiera dar a luz en su casa y el resultado fue el nacimiento de un bebé sano y salvo.

Cuando la ambulancia llegó al lugar Bastian Catriel ya había nacido, con un peso 2.910 kilos, en su casa que está en el límite entre el barrio Belgrano y el José Hernández.

Los médicos trasladaron a la Rosana y a Bastian al Hospital Materno Infantil, donde quedaron internados en buen estado de salud. También fueron acompañados por los efectivos de la policía que ayudaron en el parto, que fueron parte del momento tan especial como fue el nacimiento de un niño.

La policía está para muchas cosas es bueno saber que también está para ayudar a quienes lo necesitan, como Rosana y el pequeño Bastian Catriel.