La cultura marplatense dio una incuestionable muestra de unidad
El Festival en Defensa de la Cultura Pública fue un despliegue de la calidad del arte marplatense, en todas sus especialidades. Frente a la Municipalidad el festival divirtió, conmovió y también, sembró conciencia.
Víctimas muchos de ellos de la falta de pago y la precarización laboral a los que los somete la comuna y solidarios con sus pares otros, gran parte de las y los artistas que hacen cultura en la ciudad, estuvieron dándole vida a un festival en defensa de la cultura pública.
Música, circo, pintura en vivo, danza, performances actorales, la cultura viva salió a la calle y manifestó, en paz y con alegría, para que la Municipalidad finalmente pague a los elencos de Escenario Andante y la Comedia, a capacitadores de los diferentes programas y por la recontratación de quienes reparten arte entre los pibes de los barrios.
“Qué violencia puede tener un payaso más que su nariz?”, preguntaba Norman de la Vida, el querible y popular “Marote” del Circo La Audacia, ante el aplauso de quienes se congregaron a las puertas de una Municipalidad que parecía abandonada: nadie salió de allí para dar una respuesta y las puertas por Yrigoyen, permanecieron todo el tiempo cerradas y custodiadas.
Héctor Martiarena, técnico 1 de la Secretaría de Cultura, dijo que la idea del Festival, era que “tanto la comunidad como los artistas tengan en claro lo que está pasando en estos momentos en el Partido de General Pueyrredon en torno a la Secretaría de Cultura y a los programas culturales. Lamentablemente no hemos recibido una respuesta certera acerca del ingreso de quienes en algunos casos fueron contratadas hace varios años. Son los que garantizan la continuidad de los proyectos que involucran a más de 15 mil personas que tienen actividades programadas en más de 80 barrios de la ciudad”, expresó.
Dijo luego que “con 5 que quedamos de planta en las Usinas Artísticas y 8 en los Almacenes Culturales no podremos de ninguna manera abordar el trabajo que se venía haciendo… A los capacitadores se les están debiendo haberes desde diciembre pasado”, señaló, agregando que “desmentimos lo que dijo la titular de Cultura, Silvana Rojas, en el sentido de que la hora se paga más de 400 pesos. Un capacitador con 20 horas semanales, lo cual implica atender en 4 barrios a alrededor de 400 personas, tiene un sueldo inferior a 8 mil pesos por mes”, aclaró.
Mónica Pari, capacitadora que trabaja en los barrios, polideportivos y museos, dijo por su parte que “hay que apoyar a la cultura pública. Así lo entendieron los artistas que se autoconvocaron para estar presentes en este festival. A los capacitadores nos pagan 114 pesos la hora”, aclaró, agregando que “creo que la ciudadanía desconoce cuál es nuestra labor y lo que nos debe el municipio. Los que se ocupan de la Orquesta Infanto Juvenil, que fueron contratados por la actual gestión, si bien hace 3 meses que no cobran, igual estuvieron trabajando”, expresó.
Mario González, capacitador socio cultural con nueve años de ejercicio, manifestó por su parte que “seguimos sin novedades, razón por la cual nos mantenemos en estado de asamblea permanente en el horario que funciona la Secretaría de Cultura, que es de 8 a 16. El miércoles la titular del área nos dijo que tienen buena voluntad pero nosotros necesitamos que haya decisiones políticas. El jueves fuimos convocados por los presidentes de los distintos bloques del Concejo Deliberante que, luego de hacernos saber que estaban al tanto del problema, calificaron de barbaridad a lo que está pasando y anticiparon que van a pedirle al Departamento Ejecutivo una definición de las políticas públicas que piensa llevar adelante”.
El tiempo parecía que no iba a alcanzar para tantos artistas que quisieron participar, pero una buena organización logró que todos pudieran hacerlo. Así, estuvieron entre otros, un ensamble de la Orquesta Infanto Juvenil dirigida por el maestro Becerra, Hazmereir, Luis Caro, Juan Sardi y Damián Villalba, José Abel Castillo, los títeres de Los Cuatro Gatos con Pablo García, Pablo Rabinovich y Pepo San Martín, Duo La Trova, Marita Moyano, Les Jubilets, Karina Levine y Luis Reales, Inche Mapu, Ale Lucero con su títere “Don Perplejo”, la Escuela de Percusión Africana Mar del Plata con su grupo de danza Yimbalaié, Hernán Pari, la murga Lavate y Vamo y los Papelnonos, entre muchos otros.
Las adhesiones fueron innumerables, desde colectivos artísticos pasando por programas radiales, escuelas, centros de estudiantes, agrupaciones políticas, periodistas, centros culturales, bandas de música y grupos de teatro.
Artistas y capacitadores, aseveraron que no van a acallar sus voces, hasta que no se les pague al último. La asamblea permanente, continúa.