Hallaron dos mochilas y camperas que podría haber usado Santiago Maldonado
Todos los elementos fueron secuestrados en el marco del operativo realizado en Cushamen. El rastrillaje incluyó el cauce y la costa del río Chubut "con resultado negativo".
Dos mochilas, varias camperas de color negro y teléfonos celulares fueron secuestrados en el allanamiento realizado ayer en la comunidad mapuche Resistencia, en la localidad chubutense de Cushamen, por orden del juez federal de Esquel, Guido Otranto, en el marco de la investigación por la desaparición de Santiago Maldonado.
Según informó hoy el juzgado en un comunicado de prensa difundido por el Centro de Información Judicial (CIJ), todos los elementos secuestrados en el marco del operativo que se desarrolló en la jornada de ayer “serán objeto de análisis científico para determinar si efectivamente pertenecen” al joven desaparecido el 1 de agosto pasado, cuando fue visto por última vez durante un operativo de Gendarmería en la comunidad mapuche de Cushamen.
De acuerdo con el informe de la Justicia, el rastrillaje de ayer incluyó el cauce y la costa del río Chubut “con resultado negativo”, y se cubrió una distancia aproximada de 6 kilómetros desde las inmediaciones del lugar en el que el joven artesano habría sido visto por última vez.
Con la intervención de 367 efectivos -pertenecientes a la Policía Federal, Prefectura, Policía de Seguridad Aeroportuaria, y policías de Santiago del Estero, Buenos Aires, San Luis y Río Negro- fue rastrillada -a pie y con canes adiestrados en búsqueda de rastros humanos- la totalidad de las 1.300 hectáreas ocupadas por la comunidad mapuche en Cushamen, ubicada en el noroeste de la provincia de Chubut.
Una de las mochilas fue secuestrada en una de las viviendas allanadas, y sus características coinciden “parcialmente” con la descripta por dos testigos de la causa como la que usaba el joven artesano cuando desapareció el pasado 1 de agosto, informó el juzgado a cargo de Guido Otranto.
La otra mochila se encontró “en aparente estado de abandono”, bajo un árbol cercano a la costa cruzando el río Chubut, y fue secuestrada “debido a la semejanza de su color con la descripta por los testigos mencionados”, precisó el juzgado en el comunicado difundido este mediodía.
Según se informó, el suelo bajo ese árbol aparentaba tener “tierra removida”, por lo que el sector fue inspeccionado por canes adiestrados en búsqueda de rastros humanos, con “resultado negativo”.
Asimismo, en distintos puntos del sector ocupado por la comunidad, fueron secuestradas “varias camperas de color negro como la que llevaba puesta la persona que se ve en la filmación”, entregada por la abogada que representa a la familia de Santiago Maldonado, Verónica Heredia.
En tanto, los teléfonos celulares fueron encontrados en las diferentes viviendas inspeccionadas, y ahora se buscará determinar si alguno de ellos pertenece a Maldonado, o si “registran datos relevantes para explicar su desaparición”, indicó el juzgado federal de Esquel.
El juzgado de Esquel precisó que, en el marco del operativo, se encomendó al personal de policía científica que realice un recorrido desde la tranquera de ingreso hasta la orilla río Chubut, “con el objeto de registrar toda la zona en filmaciones y fotografías que puedan servir de cotejo para evaluar el contenido de las declaraciones testimoniales recibidas”.
Con esa misma finalidad, se realizaron tomas desde la margen contraria del río para “ilustrar el campo de visión que habrían tenido las personas que habían logrado cruzarlo el día 1 de agosto”.
En 33 vehículos y con la asistencia de 2 helicópteros, los efectivos revisaron 21 construcciones, algunas utilizadas como vivienda por los miembros de la comunidad, otras como puestos de guardia y “muchas otras” en “evidente estado de abandono”.
Según el parte del juzgado, en el momento en que las fuerzas de seguridad iniciaron el allanamiento “detectaron la presencia de cuatro personas en diferentes lugares de la zona”, tres de los cuales eran varones, fueron identificados y “quedaron bajo custodia policial hasta que culminó el procedimiento”.
En tanto, la mujer -identificada ayer por los mapuches como Elizabeth Loncopan- “no permitió que pueda ser debidamente identificada”, por lo cual fue conducida “con esa finalidad” a la ciudad de Esquel y recuperó su libertad en horas de la tarde.
Hoy, en declaraciones radiales, una de las voceras del Pu Lof en Resistencia de Cushamen, Andrea Millañanco, desmintió que integrantes de esa comunidad hayan rastrillado el predio en busca de Maldonado, y denunció que, durante el allanamiento de ayer, algunos miembros de la comunidad fueron “precintados durante 12 horas” y hubo “maltratos constantes”.
En declaraciones a FM Blue y FM La Patriada, Millañanco dijo que el procedimiento ordenado por la Justicia constituyó “una falta de respecto hacia la familia, hacia nosotros y toda la sociedad” y consideró que, en el marco de la causa que busca dar con el paradero de Maldonado, “se intenta descalificar” los testimonios provenientes de la comunidad.
El operativo de ayer también recibió críticas de la abogada de la familia Maldonado, Verónica Heredia, quien volvió a cargar contra el juez Otranto, y consideró que el allanamiento que ordenó ayer a la comunidad mapuche fue realizado en la “máxima ilegalidad” y con “total arbitrariedad y autoritarismo”.
“En su máxima ilegalidad, el juez directamente impidió a Sergio Maldonado -hermano de Santiago- ingresar y verificar el procedimiento que se realizó de una manera desproporcionada, con un despliegue que mostró la brutalidad de la fuerza del Estado en una comunidad donde hay mujeres y niños”, dijo la abogada en declaraciones a radio Cooperativa.
Tras el operativo de ayer, Heredia y Sergio Maldonado se presentaron esta mañana en el juzgado de Esquel pero -según afirmaron a la prensa la abogada y el hermano mayor de Santiago- el magistrado rechazó recibirlos.