Bryanna Reganzani, la adolescente de 16 años que desapareció el último jueves tras salir del colegio en la localidad de Villa Madero, partido bonaerense de La Matanza, fue encontrada esta mañana frente a un local de comidas rápidas en el barrio porteño de Flores y durante su traslado al Hospital Piñero le dijo a quienes la acompañaban que fue víctima de un secuestro, informaron fuentes policiales.

La adolescente se acercó a una ambulancia privada estacionada en Avenida Rivadavia y Bonorino, donde se encuentra un local de comidas rápidas, y se identificó como Bryanna, ante lo que el personal que estaba en el vehículo se comunicó al 911.

De inmediato intervino personal de la comisaría 38, que luego tramitó su traslado al centro médico ubicado en Varela 1301, donde permanecía esta tarde bajo asistencia y contenida por el personal.

Fuentes policiales informaron a Télam que durante el traslado la joven expresó que “me secuestraron a la salida del colegio” y describió que habría sido víctima de graves delitos, aunque advirtieron que ese relato no tiene validez de declaración.

“Mi hija está bien, le doy gracias a todos. Acá hay mucha gente que ayudó para que ella apareciera”, aseguró sonriente Miryam, mamá de Bryanna, a la prensa tras el primer contacto que tuvo con su hija en el Piñero.

Al ser consultada acerca de si la adolescente le brindó precisiones sobre dónde y cómo estuvo, la mujer indicó que “lo único que me encargué es de darle besos y abrazos, y de contarle que todos la estuvieron buscando. Ella apareció y está bien”.

Miryam indicó también que la adolescente “tenía la misma ropa” que vestía cuando desapareció el jueves tras salir del colegio, situado a pocas cuadras de la casa donde vive con su mamá.

Guillermo, el padre de Bryanna, que había dialogado un momento antes con los periodistas, indicó que vio bien a su hija: “No le pregunté nada, la abracé, yo no quería que ella me dijera nada para que no recuerde”, manifestó el hombre visiblemente emocionado.

Bryanna salió de la escuela a la que asiste, Nuestra Señora de Lourdes, el jueves a las 13.45 y caminó con una amiga y la mamá por la calle Rivera, pero en la esquina de Cabildo se separaron y en las dos cuadras que restaban hasta su casa se perdió el rastro.

Miryam realizó la denuncia pasadas las 14 tras ver que Bryanna no llegaba y luego de constatar que había concurrido normalmente a la escuela y caminado a la salida junto a su amiga, como lo hace habitualmente.

El último contacto de Bryanna había sido un mensaje a su novio a las 14.07 donde le indicaba que estaba llegando a su casa y desde entonces no había vuelto a utilizar el WhatsApp.

La denuncia fue radicada en la comisaría N°1 de La Matanza como averiguación de paradero e intervino la fiscalía a cargo de Andrea Palín (UFI 9), quien se acercó al hospital Piñero junto al Comisario Mayor Enrique Sobredo, responsable de la DDI de La Matanza.

Ayer por la mañana se había llevado adelante un operativo con más de 80 efectivos de la Policía Bonaerense en la fábrica abandonada que pertenecía a jabón Federal, en Crovara y General Paz, tras lo cual fuentes de la causa confirmaron que no se había encontrado ningún elemento que pudiera aportar una pista.

Anoche, familiares, allegados y amigos de la adolescente habían realizado una misa para pedir la aparición con vida de Bryanna.

Al terminar la misa, su madre aseguró que a su hija la habían llevado por la fuerza: “Si digo que a mi hija la secuestraron es porque no creo que hayan tenido motivos para irse por su propia cuenta. Ella estaba bien, no puedo decir que estuviera deprimida o algo así”, afirmó Miryam.

El sábado, su papá también había señalado en una entrevista televisiva que “la subieron a un auto y se la llevaron”, tras afirmar que “sólo pasaron cinco minutos entre que (ella) mandó un mensaje a su novio y que su madre salió a buscarla”.

El hombre contó que hace tres meses un auto con dos jóvenes a bordo quiso agarrar a la adolescente a las 6 de la mañana, pero pudo salir corriendo, llegar a la escuela, tras lo cual fue realizada una denuncia policial y le dieron un botón antipánico que consistía en una aplicación en su celular.