Ya avanzado el segundo semestre, el Departamento Ejecutivo aún no cumplió con la presentación de la ejecución presupuestaria al 30 de junio, lo que impide que el Concejo Deliberante pueda analizar cuál fue la evolución de los recursos y de los gastos del municipio durante la primera mitad de este año.

Si bien la administración del intendente Carlos Arroyo colgó en la página oficial de la comuna un archivo PDF con algunos datos generales -los cuales encienden algunas señales de alarma- lo cierto es que todavía no les remitió esa información, de manera completa, a los concejales.

Por esa razón algunos de ellos ya expresaron sus quejas en el ámbito de la comisión de Hacienda.

Las protestas de la comisión tienen además un antecedente. Este año, en un hecho que no registraba precendentes, el Concejo Deliberante no trató las rendiciones de cuentas del ejercicio 2016 debido a que el presidente de Hacienda, Guillermo Arroyo, omitió ponerlas a consideración.

El hecho porovocó que el Tribunal de Cuentas de la Provincia reclamara explicaciones.

Cada uno de los concejales que integran la comisión se ocuparon de responder a la requisitoria formal del organismo haciendo responsable a Guillermo Arroyo quien minimizando la situación atribuyó el episodio a un “olvido”. En el marco de ese proceso que aún sigue en trámite, el Tribunal continúa monitoreando de cerca de qué manera está actuando el gobierno local para dar cuenta de los números del actual ejercicio.

Y ya hubo alguna que otra consulta sobre por qué razón, finalizando el mes de agosto, todavía no están disponibles las cifras de ingresos y de gastos del primer semestre del año.

El único elemento que los concejales tenían a mano hasta ayer para hacerse una idea del tema era un archivo en formato PDF subido a la página oficial de la comuna, en la sección “Transparencia”.

En él únicamente podían ser observados algunos números generales de la administración central.

Pero las cifras de algunos entes descentralizados (Turismo, Deportes, Servicios Urbanos y Vialidad y Alumbrado), brillaban por su ausencia.

No obstante, y a medida de que los reproches de los concejales se acrecentaban, pasado el mediodía de este jueves la página web incorporó algunos de los “estados económicos y financieros” faltantes.

Pero aún así no había sido colgada la ejecución presupuestaria, que es el documento que da cuenta en detalle de cuánto dinero entró y de cuánto dinero salió de la Municipalidad en el transcurso del primer semestre.
Cifras que preocupan

Con las cifras disponibles, desde la oposición ya se atreven a vaticinar qué panorama describirán esos datos.

Advierten que con ellos se podría constatar que el gobierno de Arroyo está cada vez más lejos de cumplir con sus metas presupuestarias porque -pese a las ayudas de la Provincia y de la Nación- está teniendo ingresos muchísimo menores a los previstos y porque el gasto está acelerándose cada vez más.

Todo esto, a pesar de que existen varias partidas, en áreas como Salud o Educación, que registran una notoria subejecución en relación a los recursos que fueron asignados a comienzos de este año.

Esta no es la primera vez que la actual administración posterga la presentación pública de los datos presupuestarios del municipio.

En octubre pasado la tardanza del gobierno de Arroyo para dar a conocer esa información había motivado una queja formal de la concejal Marina Santoro (FpV) quien a través de un proyecto de comunicación recordó que la Ley Orgánica de las Municipalidades establece la obligación de que el Ejecutivo practique “balances trimestrales de Tesorería y de comprobación y saldos para darlos a conocer”.

En aquél momento recordó además que la ley exige “remitir al Tribunal de Cuentas un ejemplar del balance trimestral dentro de los quince días del siguiente mes, justificando su publicación”.

Las cifras generales publicadas, si bien muestran una situación de equilibrio contable en la relación entre los recursos percibidos y los pagados, sugieren que tanto la administración central como los entes están acumulando un déficit inquietante.

Por ejemplo los números de la administración central señalan que los recursos percibidos al 30 de junio fueron de 2798 millones de pesos, mientras que los gastos comprometidos durante ese período suman 3364 millones, lo que indica una diferencia de 566 millones de pesos.

Lo mismo ocurre en los entes descentralizados ya que el Ente de Vialidad registró ingresos por 201 millones de pesos y un gasto comprometido de 235 millones, el Ente de Deportes con ingresos por 126 millones y un gasto comprometido de 136 millones y con el Ente de Turismo donde hubo ingresos por 34 millones y un gasto comprometido que asciende a los 44 millones de pesos.