Artistas pertenecientes a los distintos programas sociobarriales de la comuna local se manifestaron ayer para reclamar la recontratación de agentes culturales que cumplen funciones en diferentes programas, así como el pago de los salarios de los integrantes de la Comedia Municipal, de Escenarios Andantes y de artistas que ofrecieron funciones en Plaza del Agua y en la Torre Tanque.
Con carteles y creativos cánticos, en zancos, haciendo hula-hula y acrobacias, portando un enorme cartel que rezaba “si apoya nuestro reclamo, toque bocina” -que logró una amplia adhesión por parte de los automovilistas que acertaban a pasar por el lugar-, las y los artistas realizaron fuertes críticas hacia el secretario de Economía y Hacienda, José Cano, a quien le reprocharon su falta de voluntad para solucionar el conflicto. También criticaron al intendente Carlos Arroyo, quien la semana pasada había recibido a un grupo en su despacho, explicando en esa oportunidad que desconocía la situación y pidiéndoles sus teléfonos para llamarlos cuando tuviera novedades. Cosa que no ocurrió todavía.
“Este problema, que afecta a unos 100 artistas, que en muchos casos no cobran sus salarios desde octubre es de público conocimiento desde hace mucho tiempo, por eso nos llama mucho la atención que el intendente haya dicho que no estaba al tanto”, expresó Norman Pereira Wagner (el payaso “Marote”) en charla con LA CAPITAL.
“Estamos reclamando el pago por parte del municipio a la Comedia Municipal, a Escenarios Andantes y nos juntamos, también, con la gente de Almacenes Culturales y otros programas porque ya vemos que la problemática es hacia la cultura. Sabemos que hay una ley previsional que baja desde la provincia, que la cubre Loterías y Casinos, que es plata prevista para eso, pero el señor Cano no quiere hacer caso a nada y no quiere pagar”, explicó en la oportunidad.
Al referirse a la respuesta de los funcionarios, dijo que “Por parte de Cano ha sido muy chocante porque se refirió a nosotros, en un momento, como trabajadores tercerizados, como que somos proveedores del municipio, dejando de lado todo lo que es cultural. El intendente no nos contestó nada después de la reunión de la semana pasada”. En cuanto al secretario de Cultura, la coincidencia es que tiene mayor predisposición para resolver el problema: “Yo también estoy con el circo La Audacia -dijo Wagner-, estuvimos hablando con (Sebastián) Puglisi y ya ha demostrado una muy buena predisposición. Pero a él le pasa lo mismo. Llama a Cano y no le atiende el teléfono”.
Las deudas, en otros casos, datan de bastante más que algunos meses. Como lo que se le adeuda al dramaturgo y director Guillermo Yanícola, quien dio funciones en la Feria del Libro Infanto Juvenil 2014 en Plaza del Agua y desde ese momento, viene reclamando el pago. Habría cinco elencos en las mismas condiciones.
Por parte de la Comedia, Andrés Zurita es quien encabeza el reclamo y llegó incluso a solicitar la intervención del empresario teatral y ahora diputado Javier Faroni.
En rápida respuesta, el diputado provincial envió una carta al intendente Arroyo expresando entre otros conceptos que “Resulta desafortunado vedarles a estos trabajadores su salario, cuando además esta institución cultural -tras ser inhabilitada durante la dictadura de Juan Carlos Onganía en 1966- fue recuperada luego de un fuerte reclamo de la Asociación Argentina de Actores en octubre del año 2013 tras la sanción de la ordenanza 21.482 por parte del Concejo Deliberante… Por lo tanto, estamos hablando claramente de un derecho adquirido que no se puede desconocer, además que su incumplimiento implica una clara violación al orden público laboral, dejando sin un sustento básico para subsistir a personas -artistas- que viven de esta honrosa profesión. Pero además, y más importante que cualquier otra cuestión, es valorar la importancia de que haya artistas que trabajan por y para la cultura local, que son tan necesarios para una Mar del Plata mejor. Estoy seguro que usted -como hombre que trabajó honrosamente en educación durante tantos años- sabrá muy bien de qué le estoy hablando”.
La preocupación está dada fundamentalmente en la continuidad de los planes sociobarriales, a través de los cuales alrededor de diez mil personas (en su mayoría niñas y niños) pueden acceder a propuestas artísticas que de otra manera, les estarían vedadas.