por Raquel Godos

WASHINGTON, Estados Unidos.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, recrudeció especialmente esta semana sus ataques contra periodistas y medios de comunicación, haciendo uso de graves insultos, y hasta utilizando videos violentos, como el que publicó este domingo contra la cadena CNN.

Tras varios días de polémica y duros comentarios contra los presentadores del programa de la MSNBC “Morning Joe”, Trump dirigió su ira contra el canal CNN, a través de un video en Twitter en el que se lo ve golpeando a un hombre que lleva el logotipo de la cadena, bajo un ring de lucha libre.

El video ha sido la guinda de una serie de tuits que el mandatario ha publicado a lo largo del fin de semana, en los que reiteró su resentimiento contra los que considera medios de comunicación “falsos y fraudulentos”.

Asimismo, defendió su capacidad de pronunciarse a través de las redes sociales, como un “presidente moderno” y se planteó “cambiar” el nombre de CNN “Noticias Falsas”, un apelativo que usa con asiduidad, por “Noticias Fraudulentas CNN”.

El video original, que fue manipulado para incluir el logo de la cadena, es de una pelea de 2007, cuando Trump se enfrentó al director ejecutivo de la empresa de lucha libre World Wrestling Entertainment, Vince McMahon, durante un combate de “La Batalla de los Billonarios”.

#FraudNewsCNN #FNN pic.twitter.com/WYUnHjjUjg

— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 2 de julio de 2017

Trump y McMahon eligieron luchadores para representarlos en el ring, pero en un momento de la pelea, Trump se acercó a McMahon, quien estaba bajo el ring, para golpearlo contra el suelo como parte del espectáculo.

“Es un día triste cuando el presidente de Estados Unidos alienta la violencia contra los periodistas“, indicó la cadena en un comunicado tras la publicación del video.

“Claramente, (la portavoz adjunta de la Casa Blanca) Sarah Huckabee Sanders mintió cuando dijo que el presidente nunca lo había hecho”, agregó el canal en alusión a la agresión violenta que se ve en la grabación.

La portavoz adjunta de la Casa Blanca indicó el jueves pasado, tras otra polémica del mandatario por atacar e insultar a dos presentadores de la cadena MSNBC, que “el presidente de ninguna forma promovió o alentó la violencia”.

“En lugar de prepararse para su viaje al extranjero, su primera reunión con (el presidente de Rusia,) Vladimir Putin, tratar con Corea del Norte y trabajar en su proyecto de ley de salud, en su lugar está ocupado en un comportamiento juvenil muy por debajo de la dignidad de su cargo”, resaltó el canal.

Asimismo, la cadena reiteró que seguirá “haciendo su trabajo”, y que el magnate “debería empezar a hacer el suyo”.

La comentarista conservadora de CNN Ana Navarro criticó duramente al mandatario en el programa de la ABC “This Week” tras la publicación del video, que calificó de “inaceptable”.

“Es una incitación a la violencia, va a lograr que alguien de los medios de comunicación sea asesinado”, apuntó la periodista.

En el mismo programa, el asesor de seguridad nacional de Trump, Thomas Bossert, rechazó que se tratara de amenaza alguna, y recalcó “el derecho” del presidente a defenderse de los presuntos ataques que le profieren los periodistas.

El jueves, Trump desató de nuevo la polémica cuando dijo haber oído que en “Morning Joe” hablan “mal” de él, ya que según aseguró no ve el programa, y a continuación calificó a su presentadora, Mika Brzezinski, de “loca” y a su compañero y prometido, Joe Scarborough, de “psicópata”.

El presidente aseguró, además, que ambos presentadores fueron a verlo “tres noches seguidas” en torno a la víspera de Año Nuevo a su club de Mar-a-Lago (Florida) e “insistieron en unirse” a él, algo que después ellos negaron de pleno.

“Ella sangraba profusamente por un estiramiento facial. ¡Les dije que no!”, declaró Trump, provocando la indignación tanto entre republicanos como demócratas.

Los dos conocidos periodistas suelen ser críticos en su programa con el presidente y recientemente se habían hecho eco de la noticia, publicada por The Washington Post, acerca de la aparición de portadas falsas de la revista Time con una fotografía de Trump enmarcadas y colgadas de las paredes de varios de los clubes propiedad de Trump.

“Este es un presidente que combate el fuego con fuego y no se va a dejar intimidar por la prensa liberal, las élites liberales de los medios de comunicación o de Hollywood, o por nadie”, justificó entonces la portavoz de la Casa Blanca.

EFE.