“La ley de trata es más compleja que se aplique para las chicas trans”
Las abogadas Carolina Ciordia y Florencia Ocampos representan a una chica trans investigada por la Justicia Federal en la causa "Tacos blancos". Aseguran que es víctima de la situación.
Las chicas trans que fueron liberadas de la red de trata de persona, prostitución y venta de droga conocida como “Tacos blancos” volvieron a trabajar en las calles de la “zona roja”. Denuncian que no recibieron una asistencia real del Estado y que hoy “no tienen otra opción que ejercer la prostitución”.
“La ley de trata es más compleja que se aplique para las chicas trans”, consideran las abogadas Carolina Ciordia y Florencia Ocampos, representantes de una travesti investigada por la Justicia Federal que la considera como una supuesta cómplice de la organización delictiva de la que también participaron cinco policías.
Preta Tavara Trigoso es una chica trans peruana que pasó casi un mes en la cárcel acusada de ser parte de la red de trata de personas “Tacos blancos”. Sin embargo, para sus abogadas, es una víctima más que también era obligada a prostituirse y vender droga.
“Preta está en la misma situación de vulnerabilidad que las demás chicas, pero que por los investigadores en un principio fue considerada como parte de la organización que las explotaba”, expresa la abogada Ciordia y explica que fue considerada de esa manera porque ayudaba a otras chicas trans inmigrantes a hacer su documento de identidad respetando su género y por ser parte del colectivo Grupo Transparencia Marplatense (GTM), que reúne a chicas trans de la ciudad, las contiene y ayuda.
Para la Justicia Federal, Tavara Trigoso facilitaba la adaptación de las chicas trans que llegaban a Mar del Plata, organizaba las paradas de la zona roja y ganaba dinero de esa manera. Sin embargo, anta la falta de mérito quedó liberada. No había pruebas que respaldaban esta hipótesis.
“Quedó claro que ella es una chica que trabajaba ejerciendo la prostitución. No ganaba parte de lo que sus compañeras cobraban trabajando sexualmente. No tenía ningún cargo directivo en GTM, ningún puesto, lo único que se consideró es que ella ayudaba a las chicas a hacer sus DNI y eso les pareció sospechoso”, consideran Ocampos y Ciordia.
“Las chicas no tienen otra opción que ejercer la prostitución”, dicen las abogadas y agregan: “Las chicas, como víctimas de trata de persona, no fueron reubicadas en hogares, trabajos o en otra situación”.
Si bien, la ley contra la trata de persona tiene artículos para proteger a las víctimas, tanto Ciordia como Ocampos consideran que “la ley es más compleja que se aplique para las chicas trans, que no consiguen trabajo formal o se anotan en programas de empleo del Estado y no obtienen nada”.
Prostitución y droga
Desde un primer momento, la Justicia Federal dio a conocer esta investigación en la zona roja como “Tacos blancos”, pero para Ciordia “considerar que la prostitución y la droga es lo mismo es terrible y que todas las chicas que están ahí están relacionadas con la venta de droga también”.
“Tacos blancos las estigmatiza desde un lugar en el que son mujeres que la sociedad no les cree que son mujeres y que solo venden droga, las miran desde ese lado. Y eso es desconocer sus vidas personales, su angustia, su estigmatización. Las chicas tienen pasados muy dramáticos, no fueron aceptadas por su familia ni por la sociedad y fueron excluidas, empujadas a irse de su pueblo y de su país”, agrega la abogada.
Ciordia está en contacto con la dura realidad de la comunidad de chicas trans de la ciudad, explica que la mayoría “vienen a Argentina porque hay leyes más progresistas, pero cuando llegan acá no encuentran que esas leyes progresistas se pongan en práctica”.
“Por eso las chicas llegan y tienen que ejercer la prostitución, pararse en las esquinas como trabajadoras sexuales y eso va de la mano con la venta de estupefacientes, que claramente es un menudeo y que claramente ninguna de ellas es una tratante o narcotraficante o tacos blancos”, concluye la abogada.
La causa
A mediadios del mes pasado la Justicia realizó más de 40 allanamientos en los que fueron apresados cincos policías, los líderes de la banda y vendedores de cocaína. En total, fueron 16 los imputados atrapados durante los procedimientos, entre esas personas Preta Tavara Trigoso quien, junto a dos hombres se encuentra en libertad por falta de mérito. Además, fueron liberadas 22 mujeres y trans que eran obligadas a vender estupefacientes y a prostituirse.