Unos 70 edificios continúan con el servicio de gas interrumpido
Desde Camuzzi aseguraron que las demoras en el restablecimiento del suministro dependen de cuestiones internas de los propios consorcios.
El suministro de gas en la ciudad sigue siendo motivo de preocupación para muchos. En especial para los vecinos de los 70 edificios que aún mantienen interrumpido el servicio desde que la empresa Camuzzi detectó deficiencias en las instalaciones.
Con el correr de los meses, y ante la persistencia del panorama, surge el interrogante de cuáles son los plazos que establece la regulación vigente y las razones que demoran la reconexión de aquellos edificios donde la situación constatada se haya regularizado.
“Muchas veces queda el fantasma de los tiempos de reconexión y se le adjudica a Camuzzi alguna responsabilidad al respecto”, señaló a LA CAPITAL el gerente de Relaciones Institucionales de Camuzzi, Rodrigo Espinosa.
“Lo cierto, -indicó-, es que la falta de un acuerdo en materia de presupuestos o la demora en la solicitud de inspección por parte de los gasista matriculados suelen ‘ralentizar’ los tiempos”.
Los plazos legales
“Lo que suele pasar es que los edificios tardan en ponerse de acuerdo con los presupuestos o prefieren comparar presupuestos con otros gasistas matriculados. También ocurre que muchos propietarios sólo ocupan los departamentos en los meses de verano por lo que no están de acuerdo en poner cierta cantidad de dinero para hacer las refacciones, entonces empiezan estas discusiones internas que hace que las cosas demoren más”, indicó.
A su vez, señaló, otra situación posible es que “el matriculado esté diciendo que ya presentó todo en Camuzzi y nos adjudique la demora. La realidad es que cuando se presenta el formulario, tanto para una inspección parcial como para la final, el mismo tiene una fecha de presentación a partir de la cual comienzan a regir los tiempos regulatorios que nos obligan a verificar el trabajo en diez días como máximo”, señaló.
Si esto no ocurre y el instalador en cambio regulariza las deficiencias y presenta los formularios en la empresa, “una vez aprobada la inspección, se procede a reconectar el suministro que de acuerdo al Reglamento de Servicio y para este tipo de casos, debe efectuarse en el plazo de 2 días hábiles contados a partir de la fecha en que la inspección resultara aprobada”, indicó.
¿Irregularidades detectadas?
En el momento en el que la compañía toma conocimiento que un edificio o un usuario en particular tienen una deficiencia a través de un reclamo o una denuncia, se acciona un protocolo de intervención por parte de Camuzzi para verificar el panorama.
“El corte de suministro sólo se efectúa cuando se verifica que las instalaciones no cumplen con las normas de seguridad vigentes y que por ende, se encuentra en riesgo la seguridad de las personas y de los bienes. Otras instalaciones fuera de norma como una llave de paso que no esté instalada en la medida reglamentaria, no provoca un corte en el suministro pero si pedimos que se regularice”, explicó.
El vocero de la empresa indicó, a su vez, que las principales deficiencias que se encuentran son “pérdidas en la instalación interna, problemas en las ventilaciones de los ambientes (ausencia de rejillas, taponamiento de las existentes) y en los conductos de evacuación de gases de los artefactos (incompletos, obstruidos, fuera de norma)”.
“Hay que tener en cuenta que estos casos son de enorme peligrosidad ya que pueden derivar en acumulaciones de gas con potencial riesgo de explosión o en la aparición de monóxido de carbono”, advirtió.
Obras sin acceso al suministro
En mayo, el presidente del Colegio de Técnicos, Diego Peláez había manifestado a LA CAPITAL su inquietud por los plazos anunciados por el gobierno para el inicio y la finalización de la obra del gasoducto que pretende ampliar la capacidad del sistema, inversión que posibilitará sumar a la red a “60 edificios construidos o en proceso de construcción que fueron diseñados para funcionar con gas que están sufriendo la falta de suministro”.
Al respecto, Espinosa señaló que no cuentan con datos oficiales sobre la cantidad de usuarios que no tiene el servicio. “Al haber sido tan público el estado de la situación del sistema puede pasar que haya gente que no vaya a solicitar el servicio de gas porque saben cuál es el problema, por lo que el número puede ser bastante subjetivo”, señaló.
“Las factibilidades actualmente están condicionadas a obras de refuerzo, que son las obras técnicamente necesarias para garantizar que ese futuro consumo no puede poner en riesgo a los actuales usuarios del servicio”, indicó.
Y agregó: “Una vez que el refuerzo quede habilitado, para la consumos típicos, y con ello me refiero a los residenciales por ejemplo, ya no van a estar sujetos a ninguna obra complementaria”.
El gasoducto, la solución
A principios de mayo, tuvo lugar la tercera y última etapa del proyecto que pretende aumentar la capacidad de la red de transporte y distribución de gas: el llamado a licitación para la contratación y ejecución del montaje de cañerías.
“Todas las etapas han sido anunciadas y lanzadas a licitación. El último paso es que se comiencen a adjudicar las distintas etapas”, señaló Espinosa, asegurando que desde Camuzzi se encuentran “confiados” de que ocurrirá en un “muy corto plazo”.
Para el caso de las obras asociadas exclusivamente al “Sistema de la Costa”, el objetivo es expandir la capacidad del Gasoducto de la Costa y del Gasoducto Tandil-Mar del Plata, proyectando una demanda de 84.500 usuarios adicionales.