Este lunes se conocieron los resultados del nuevo informe local sobre el Indicador Barrial de Situación Nutricional (ISBN) que se realizó en 749 niños y adolescentes de 19 barrios de General Pueyrredon. El mismo, realizado semestralmente por el Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci), arrojó cifras preocupantes respecto la alimentación de los más chicos.

Según lo detallado en las conclusiones, la cantidad de niños y adolescentes de entre 0 a 19 años que asisten a comedores barriales aumentó de un 503 a 749, en comparación con los datos del año pasado y los relevados durante marzo y abril de este año.

“Casi un 50% de aumento”, indicó el coordinador general del instituto, el abogado Rodrigo Blanco, quien calificó al aumento de “sustancial”.

“Esto es un llamado de atención a todos como sociedad pero fundamentalmente al Estado. La Municipalidad tiene y debería tener las herramientas para darle un abordaje a la situación y esperamos que no hagan oídos sordos y haga un recibimiento sincero de este diagnóstico y a partir de esto genere las políticas públicas que hagan falta”, señaló.

Malnutrición

Otro de los datos más alarmantes del estudio es que, del total relevado, el 43% presenta síntomas de mal nutrición. Utlizando los parámetros de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el estudio se basó en tres indicadores antropométricos que abarcan tres variantes: bajo peso, sobre peso y obesidad.

“En general, hay prevalencia de sobrepeso y obesidad, pero también, en algunos grupos etarios, como el de lactantes de 0 a 2 años, encontramos números cercanos al 10% de indicadores por bajo peso”, señaló Blanco.
Indicó, a su vez, que en este mismo grupo y el de primera infancia, que abarca los menores de 2 a 6 años, se registró “un número muy importante de baja talla”.

“Uno de cada cuatro chicos de 0 a 6 años están hoy con baja talla. Esto se da cuando ya hay un proceso en el que no se crece acorde al crecimiento etario. Esto da cuenta de un proceso prolongado de permanencia en situaciones de vulnerabilidad”, aseveró.

En este sentido, los porcentajes de mal nutrición señalados según el grupo etario son: 32,86% para los lactantes (0 a 2 años), 42,13% para la primera infancia (2 a 6 años), 47,10% para la segunda infancia (6 a 12 años) y 39,68% para los adolescentes (12 a 19 años).

Condiciones habitacionales

Si bien el trabajo no se centró en el estado de las viviendas de los menores afectados, el estudio pudo constatar una falta de acceso a agua potable en muchos de los barrios relevados.

“Lo que esto nos indica es que se está consumiendo y cocinando con un agua que no cumple con los requerimientos básicos del código alimentario argentino. Es agua que no está apta para el consumo humano e impacta en la salud del menor”, señaló Blanco.

Al igual que las versiones anteriores, el trabajo de relevamiento se realizó en 19 barrios del municipio de General Pueyrredon, siendo 4 de éstos de la localidad de Batán (La Serranita, Villa del Parque, Batán Norte y El Colmenar) y los restantes de Mar del Plata. Algunos de ellos fueron Nuevo Golf, Parque Palermo, Parque Hermoso, Libertad y Malvinas Argentinas.

Los comedores sondeados, en tanto, fueron los mismos 21 del informe anterior con la incorporación de dos nuevos espacios. Todos coordinados por la organización Movimiento Barrios de Pie, quienes articulan el trabajo con la institución responsable del relevamiento.

El equipo de investigación, en tanto estuvo conformado por una médica generalista y por profesionales de la nutrición y el servicio social. Mientras que las encuestas fueron llevadas a cabo por las 47 promotoras de salud barriales que cuenta la institución.