La industria naval a la espera de la votación de dos leyes clave
por Enrique Godoy
La actividad del Congreso está prácticamente paralizada: en lo que va del año, diputados y senadores sólo sesionaron una vez, aprobando una ley en cada una de las cámaras. Los especialistas en la materia y los dirigentes experimentados coinciden en que es algo esperable en un año electoral, donde hay más campaña y menos sesiones, a lo que se suma la falta de un bloque con la fuerza suficiente para imponer su agenda.
Está situación de stand-by legislativo se vive con tensión por parte de sectores que, como el de la industria naval, están a la espera de la sanción de normas claves para su actividad.
Las leyes de Marina Mercante y de Industria Naval obtuvieron media sanción en el Senado en noviembre de 2016. Se confiaba en que con el inicio de sesiones ordinarias el 1° de marzo, hubiera un rápido tratamiento de normas fuertemente esperadas y discutidas por los diferentes representantes del sector, pero como se dijo, Diputados solamente rompió su inactividad para tratar una ley, la denominada “Gratuidad de Tarifas del Servicio Eléctrico para Usuarios Electrodependientes”, en sesión especial, el 19 de abril pasado.
Aunque los proyectos con media sanción cuentan con el apoyo de representantes como Juan Speroni, secretario general del Sindicato Argentino de Obreros Navales y Juan Carlos Schmid, secretario general de la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval Argentina (Fempinra), otros referentes del sector se han manifestado en desacuerdo con estas normas, por no considerarlas representativas de la totalidad de los grupos de interés afectados.
No está en discusión la importancia de la sanción de las leyes de Industria Naval y Marina Mercante para el desarrollo económico del sector y del país. Lo que está en juego es el tipo de proyecto que queremos: si apoyamos leyes que no tengan el consenso de todos los actores involucrados y continuamos soportando la importación indiscriminada de buques usados y el charteo eterno, o bien, si nos comprometemos de forma conjunta, en la construcción de una norma equilibrada, que sostenga una actividad multiplicadora de trabajo argentino para los argentinos, con buques construidos en astilleros nacionales y tripulados por marinos locales, con creación de valor agregado que posicione a la industria competitivamente para ganar mercados externos.
Mientras tanto, el pasado 2 de mayo debía reunirse en Diputados, la Comisión de Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios, pero el encuentro fue postergado para este 9 de mayo , cuando se espera que los proyectos de ley y su reglamentación sean tratados en profundidad.
(*): Presidente del astillero Tecnopesca Argentina SA de Mar del Plata (TPA) y vocal titular de la Federación de Industria Naval Argentina.