Bochornosa eliminación y problemas a futuro
Un proyectil que impactó en un juez de línea llevó a la terna arbitral a suspender el partido a los 19' del complemento. Empataban 1 a 1 y a Alvarado no le alcanzaba.
por Víctor Molinero
Alvarado sumó unos cuantos problemas este miércoles en el estadio José María Minella frente a Defensores de Belgrano. Una agresión al juez de línea Leopoldo Gorosito a los 19′ del complemento terminó con el árbitro Adrián Franklin suspendiendo el partido 20′ después, cuando estaban 1 a 1 y el equipo de Gustavo Noto necesitaba dos goles más para forzar los penales.
Así, Alvarado se queda fuera de la Copa Argentina (había perdido 1-3 el cotejo de ida) y podría recibir además una sanción disciplinaria de parte de los organismos de seguridad deportiva.
El final fue lamentable e inesperado. Y cortó de raíz con la ilusión de un equipo que tenía bastante cuesta arriba la serie pero, pensar en convertir dos goles en 30′, aún sin demostrar un gran juego, no parecía una quimera.
Mientras que la pelota rodó
Contrariamente lo que se podía imaginar, el conjunto local no pudo llevarse por delante a los de Villa Ramallo en el arranque. Por el contrario, en los primeros instantes manejó mejor la pelota la visita, que “amagó” plantarse con un 3-4-2-1 pero pasados los diez minutos, cuando Alvarado comenzó a buscar por las bandas, replegó a Fernando Torrent y Fernando Ponce para pasar a defender con cinco hombres en línea (5-4-1).
Igual la primera chance para abrir el marcador la tuvo Defensores, a los 7′, cuando Julián Bonetto recibió profundo, se metió al área y buscó con un derechazo bajo, que Rodrigo Barucco sacó al córner con un manotazo sobre el primer palo.
Alvarado, que saltó al campo de juego con un 4-2-3-1, con Joaquín Susvielles como única referencia de área, comenzó a inclinar su búsqueda por la derecha, donde Gabriel Compagnucci le ganaba a Ponce.
El elenco de Gustavo Noto dispuso de un buen pasaje en el que, con dos pelotas paradas, estuvo muy cerca de llegar al gol. A los 17′, Francisco Molina lanzó un tiro de esquina desde la derecha y Ramiro Jorge no pudo conectar de lleno en el primer palo ante las dudas de Juan Dobboletta.
Cuatro minutos después, el córner lo lanzó Damián Luengo desde la izquierda y en primera instancia casi se le mete olímpico a Dobboletta. Lo salvó Mignaco que sacó sobre la línea. Pero la pelota quedó en juego, Manuel Madrid buscó aprovechar el rebote, otra vez se encontró con un despeje oportuno y Susvielles se arrojó en paloma, cabeceó con medio arco libre y la pelota terminó dando en el palo izquierdo antes de salir por línea de fondo.
Sin embargo, Defensores tuvo las dos últimas situaciones claras de la etapa inicial, cuando rompió líneas a pura gambeta y sacó réditos. Porque primero, a los 24′ Bonetto “limpió” a tres rivales a pura gambeta y fue derribado justo antes de entrar al área (la visita protestó que la falta había sido adentro) por Ramiro Jorge, cuando se aprestaba a definir frente a Barucco.
Y a los 39′ se dio una acción similar. Esta vez fue Walter De Souza el que apeló a la gambeta para meterse al área y Emanuel Urquiza el que lo terminó derribando. Entonces Adrián Franklin si entendió que había penal, lo cobró y Federico Castro, con un remate cruzado de derecha hizo estéril la estirada de Barucco y puso el 1 a 0 para Defensores a los 41′ de esa etapa inicial.
De la ilusión a la frustración
Alvarado se fue al descanso lleno de problemas. Porque no le encontraba la vuelta al partido y porque tenía que hacer tres goles (y el rival ninguno) para forzar los penales. O destaparse y marcar más de cuatro para no recurrir a la definición desde los doce pasos.
La impotencia del local en todo el primer tiempo se transformó en ilusión en el reinicio del juego, tras el descanso. Es que luego de una agresión mutua vieron la tarjeta roja Damián Luengo y Federico Castro a los 5′. Con el rival sin delanteros en cancha, Noto mandó a la cancha a Wilson Albarracín por Madrid para echar el resto. Y enseguida, a los 10′, la movida tuvo rédito cuando el puntano convirtió, de penal (clarísima infracción a Escott), el empate.
Entonces el que movió piezas fue Héctor Storti, el técnico visitante, que metió al goleador Matías Nouet y al “rapidito” Franco Coronel para tener presencia arriba y poder mantener a raya. El propio Nouet tuvo el segundo en sus pies a poco de haber ingresado cuando quedó mano a mano con Barucco, lo eludió pero remató débil y permitió la reacción de Ramiro Jorge para llegar al despeje.
Enseguida, un Defensores que había recuperado la capacidad de inquietar a la defensa local, dispuso un tiro de esquina desde la derecha. Pero nunca se ejecutó. Porque Gorosito recibió un proyectil desde la tribuna local (habría sido arrojado desde la platea descubierta), cayó al suelo y el partido ya no se reanudó.
Entre la atención médica al juez de línea y conversaciones varias dentro del campo entre la terna arbitral, las autoridades policiales y dirigentes de Alvarado, se fueron otros veinte minutos. Hasta que llegó la decisión final y Adrián Franklin decretó la suspensión.
Alvarado se queda afuera de la Copa Argentina. Y probablemente tendrá que lamentar alguna sanción de los organismos de seguridad.