La Dirección de Regularización Dominial detectó la existencia de personas que vendían terrenos del municipio o que se encontraban abandonados sin ninguna clase de documentación de por medio.

En un trabajo en conjunto con la Asesoría Legal, se realizarán las denuncias correspondientes para que se investigue penalmente la cuestión.

Su titular, Gonzalo Scioli, expresó a LA CAPITAL que “se vendían terrenos a sumas irrisorias para lo que son los valores de mercado pero, claro, como no les podían dar ninguna garantía dominial se los entregaban por 15 ó 25 mil pesos”.

El funcionario reconoció que en el ardid muchos vecinos de condición humilde vieron una gran oportunidad de iniciar un proceso para tener su techo propio y cayeron en la trampa.

“Hay gente que con mucho esfuerzo ya construyó su casa en estos terrenos. Hemos detectado casos de vecinos que hace entre 10 y 15 años que han tomado posesión”, indicó Scioli.

En tanto, reconoció que al menos dos barrios se constituyeron de esta manera y que los vecinos fueron víctimas de todo este accionar y por eso desde la comuna se les respetará el lugar y se les intentará brindar la escritura que les de la posesión definitiva.

Asimismo, reconoció que puede haber terrenos privados que también estén en estas condiciones y que se les informará a sus titulares para que puedan ver qué camino seguir.

Scioli puntualizó que ya fueron detectados entre 60 y 70 terrenos que fueron vendidos “ilegalmente” y que luego será la justicia la encargada de investigar lo sucedido.

Todo surgió hace poco tiempo cuando el doctor Gonzalo Scioli asumió como director y en una primera medida ordenó realizar un importante relevamiento de terrenos en tenencia precaria.

“Desde hace muchos años Balcarce presenta una serie de inconvenientes en los que es la regularización dominial. Entre ellas, nos encontramos con gente que está ocupando terrenos en condiciones muy precarias en cuanto a documentación”, argumentó.

Y agregó que “así pudimos detectar que hay algunos vivos, por llamarlos de alguna manera, u oportunistas que han vendido entre comillas tierras municipales a gente muy humilde que tenía la necesidad de contar con terreno propio o casa propia. Hay que destacar que no tienen las facultades para vender porque no eran tierras de ellos y no contaron con ningún papel o documentación para hacerlo”.

La investigación descubrió que los estafadores tenían el dato de cuáles eran las tierras fiscales y que aprovecharon “la inacción” de gestiones de gobierno anteriores. “Ante la pasividad del municipio en otros tiempos, estos vivos tomaron las tierras fiscales, las lotearon y las vendieron”, indicó.

Toda esta acción fue toda muy precaria porque no hubo documentos ni participación de ningún profesional de ninguna índole”, enfatizó.