El fin de semana extra largo contó con 96.770 turistas y una ocupación hotelera que estuvo arriba del 54 por ciento en la ciudad, según el balance dado a conocer por Mario Marchioli, presidente del Ente Municipal de Turismo (Emtur). La cifra de visitantes representa poco menos de la mitad de los que arribaron en Semana Santa. Es cierto que la incertidumbre económica y que la fecha haya coincidido con el festejo del Día del Padre no ayudaron a una mayor convocatoria.

Marchioli, en charla con LA CAPITAL, se mostró conforme con el número de turistas que se vieron en las calles de la ciudad.

– ¿Qué balance hace de la cantidad de visitantes que tuvo Mar del Plata durante este fin de semana largo?

– Es bueno porque sabemos que históricamente, no solamente en nuestra ciudad sino en el resto del país, este es el fin de semana largo más débil de todo el calendario. Nosotros esperábamos gente de Ciudad Autónoma de Buenos Aires y de la misma provincia de Buenos Aires y eso es lo que sucedió.

– De todas maneras por más que la respuesta de la gente no haya sido lo extraordinaria de otras veces, es para tener en cuenta.

– Tal cual. El miércoles teníamos muy poco caudal de reservas y se incrementó el jueves, día que empezó a llegar gente, y el viernes el tráfico hacia la costa a la altura en Samborombón era de 2 mil vehículos por ahora. Se cumplieron todas las expectativas que teníamos. Estamos arriba de un 54 por ciento de ocupación. Cuando la Asociación de Hoteles dice el 80 por ciento por ahí se confunde. No es inexacto lo que dice. Ellos computan tres, cuatro y cinco estrellas. Nosotros sabemos que los fines de semana comunes ese tipo de establecimientos trabajan prácticamente arriba del 80 por ciento de ocupación, porque no iba a ser así un fin de semana largo como este. Nosotros computamos, también, una, dos estrellas, apart hotel, hostel, entonces ese guarismo baja.

Tuvimos un fin de semana con buen clima, con mucha sensación de fin de semana largo en la calle. Vimos a la gente en la calle y en los comercios. Quizás los comercios no están del todo tan conformes y me adhiero a ese inconformismo pero realmente fue una bocanada de aire fresco.

Ojalá volvamos a tener este tipo de fin de semana largo que Mar del Plata lo necesita y muchísimo.