5 consejos esenciales para mantener un corazón saludable
Según la OMS, las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte a nivel mundial y más del 80% de los decesos son prevenibles, ya que están vinculadas a factores modificables como la hipertensión, el colesterol alto, una dieta poco saludable, el tabaquismo y la inactividad física, entre otros.
Desde el año 2000, cada 29 de septiembre se celebra el Día Mundial del Corazón. Esta fecha fue establecida por la Federación Mundial del Corazón y la Organización Mundial de la Salud (OMS), con el objetivo de concientizar a la población sobre la importancia de la salud cardiovascular y la prevención de enfermedades relacionadas. Mantener un corazón sano es clave para reducir el riesgo de padecer problemas cardiovasculares, que son una de las principales causas de muerte a nivel global.
De acuerdo con la OMS, las enfermedades cardiovasculares (ECV) son la causa principal de defunción en todo el mundo. Se estima que 17,9 millones de personas fallecieron en 2019 como consecuencia de una enfermedad cardiovascular, lo que representa el 32% de todas las muertes a escala mundial.
“Existen diversas causas de las enfermedades cardiovasculares, una de las principales está relacionada con el depósito de colesterol en el interior de las paredes de las arterias, lo que provoca obstrucción en arterias de pequeño calibre y la formación de placas fibro lipídicas con el posterior riesgo de su ruptura, lo que se conoce como ‘accidente de placa’ y sus complicaciones como el ACV (accidente cerebrovascular) o el IAM (infarto agudo de miocardio). Sin embargo, otros aspectos como el tabaquismo, una mala alimentación y el sedentarismo, también tienen un impacto negativo en la salud del corazón”, explicó el Dr. Raúl A. Vargas, cardiólogo de Boreal Salud (M.P. 50.86).
Con el objetivo de fomentar la prevención y promover la salud cardiovascular, los especialistas comparten cinco consejos clave:
Adoptar una alimentación balanceada: Consumir una dieta rica en frutas, verduras, granos y proteínas magras es esencial para cuidar el corazón.
Ejercitar de forma regular: La OMS recomienda al menos 150 minutos de actividad física moderada o 75 minutos de actividad intensa por semana.
Limitar el consumo de sustancias perjudiciales: la sal, el alcohol y el tabaco son unos de los mayores enemigos del corazón. Abandonar estos hábitos reduce significativamente el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Monitorear la presión arterial y el colesterol: mantener niveles adecuados de presión arterial y colesterol es esencial. Consultar al médico regularmente y seguir sus indicaciones es fundamental.
Controlar el peso: el sobrepeso y la obesidad son un riesgo cardiovascular importante.
Mantener una buena salud cardiovascular no solo previene enfermedades, sino que también trae numerosos beneficios para el bienestar general. Un corazón saludable permite que el cuerpo reciba un suministro constante de sangre oxigenada, lo que mejora la capacidad física, la resistencia y la energía. Además, una circulación adecuada favorece el funcionamiento de otros órganos vitales, como los riñones y el cerebro. Con un corazón fuerte, las personas tienen mayor probabilidad de envejecer de manera saludable.
“Es importante resaltar, que acudir al médico regularmente es crucial, especialmente porque muchas enfermedades cardiovasculares no presentan síntomas evidentes en sus primeras etapas. Factores como la hipertensión o el colesterol alto pueden pasar desapercibidos, lo que los convierte en “asesinos silenciosos”. Esto es particularmente preocupante en personas con condiciones preexistentes como diabetes, obesidad o también antecedentes familiares de problemas cardíacos. Un diagnóstico temprano, junto con un seguimiento médico adecuado, puede marcar la diferencia entre una vida prolongada y saludable o el desarrollo de complicaciones graves”, concluyó Vargas.