“Argentina, Argentina”, “Sí, se puede” y “El pueblo unido, jamás será vencido” fueron algunos de los cánticos enarbolados este sábado a la tarde en la convocatoria realizada en el centro marplatense en defensa de la democracia y como apoyo al gobierno nacional.

La marcha se extendió a lo largo de cinco cuadras, por la avenida Luro, y después de recorrer varias calles centricas volvió al punto de partida. “Olé, olé, olá, si este no es el pueblo, el pueblo dónde está”, fue otra de las consignas cantadas por miles y miles de ciudadanos que respondieron al llamado virtual que -bajo la denominación de #1A– invitaba a marchar por la democracia. Y también, aunque no fue explicitado en la convocatoria, en apoyo al actual gobierno nacional.

Agitando la bandera argentina, Ana María y Rosita explicaron que se hicieron presente “para defender a la democracia y porque no queremos que vuelva el gobierno anterior”.

Las banderas argentinas fueron el denominador común de los manifestantes, que optaron por no portar ninguna identificación polìtica. En ese sentido, un único cartel de “Fuerza Vidal” rompió con la veda tácita.

Nora había llegado con su hermana Silvia y su amiga Cristina para “defender la democracia”, igual que José Luis que sumó a la explicación “basta de corruptos. Por eso vine”.

Susana y José Luis, desde arriba del monumento, explicaron que se manifestaron “para apoyar al gobierno, al que volveríamos a votar”. María José, junto a sus dos pequeños hijos que portaban banderas argentinas, opinó que “estoy acá para apoyar al Presidente”.

Caminantes

Luego de los cánticos iniciales, y de entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, se improvisó una marcha que fue encabezada por una insignia nacional que rezaba “Sin capuchas ni palos”.

La marcha se prolongó a lo largo de cinco cuadras, ya que cuando la cabecera llegaba a Corrientes todavía seguían partiendo desde el monumento a San Martín para seguir ala multitud.

Lita, mientras caminaba rumbo a la costa, aseguró que “quiero que el país salga adelante, por eso estoy acá”, mientras que su amiga María Haydeé explicó su presencia porque “quiero apoyar a la democracia.

Como el tránsito nunca fue cortado, los vehículos siguieron circulando por las calles que cortaban la avenida, mientras que los manifestantes al llegar a las boca calles los dejaban pasar hasta que cambiaba la luz del semáforo.

Ni el viento del este frenó a los caminantes, incluso el equipo de básquet Regatas Corrientes debió abordar el ómnibus que los conduciría a jugar su encuentro con Quilmes sobre Entre Rios por la marea humana que le impidió el paso a la avenida.

En tanto, la manifestación siguió por la costa hasta Rivadavia y tomaron por esa arteria para volver al lugar de partida.