La Asociación Frutihortícola de Productores y Afines del Partido de General Pueyrredon expresó su “malestar y disconformidad” con el intento de la gestión del intendente Carlos Arroyo de imponer nuevos tributos a la actividad.

Del mismo modo que ya lo hicieron otras entidades del comercio y de la industria local, los productores resolvieron manifestarse en contra de la posibilidad de que la comuna comience a exigirles a sus asociados el pago de diferentes tasas y reclamaron que el Concejo Deliberante rechace la implementación de esas medidas, impulsadas a través del proyecto de la ordenanza fiscal.

La asociación manifestó su postura a través de una nota enviada esta semana a los concejales, en la que además de criticar la iniciativa, formuló otros cuestionamientos contra la gestión de Arroyo.

“Comprendemos las necesidades económicas del municipio, pero sería importante comprender también las necesidades de los productores“, sostuvo la entidad, advirtiendo que las medidas propuestas por el secretario de Economía y Hacienda, Hernán Mourelle “desalientan a seguir produciendo en una de las tierras más fértiles del mundo”.

Además de cuestionar el intento de gravar a la “actividad primaria” y de exigirles a los productores el pago de las tasas de Habilitación y de de Seguridad e Higiene, la Asociación denunció que en los últimos meses inspectores municipales recorrieron campos de la zona exigiendo “habilitaciones, seguridad e higiene, e incluso controlador fiscal” como si esos establecimientos se trataran de “un local comercial o una planta industrial”.

Según el presidente de la institución, Ricardo Velimirovich este hecho acaba de ser denunciado en la Defensoría del Pueblo, ante la cual fueron presentadas decenas de copias de las actas labradas por los inspectores.

“La ordenanza se presentó el 4 de diciembre y nosotros tenemos actas del 27 de noviembre, firmadas por inspectores que ya nos exigían cumplir con los requisitos de una norma que ni siquiera está aprobada. Nos parece muy grave que la Municipalidad actúe de esta manera”, afirmó.

Para Velimirovich, el proyecto del gobierno es “inaplicable” porque no existen posibilidades de que la comuna grave con tasas a la actividad frutihortícola primaria.

“Es una idea descabellada que nunca se va a poder cumplir porque para eso los campos tendrían que empezar a estar habilitados por la municipalidad y para que se así habría que presentar planos. ¿Cuáles serían los planos a presentar en un campo?”, se preguntó.

Además el dirigente subrayó que su actividad, está regida por la Ley Nacional Agropecuaria, razón por la cual, además de elevar sus quejas ante el Concejo Deliberante, la entidad ya le hizo llegar su postura al Ministerio de Agroindustria.

“Además, no hay chances de que la Municipalidad pretenda cobrar una tasa por un servicio que nunca podría prestar. De hecho hoy no recibimos ninguna contraprestación porque en los campos no tenemos nada; ni caminos, agua, gas, recolección de residuos ni seguridad. Por eso nos intriga mucho saber bajo qué concepto ahora el municipio pretende cobrarnos una tasa”, agregó.

Asimismo, así como lo hicieron dirigentes de otros sectores, Velimirovich, reprochó que la gestión del intendente Carlos Arroyo no haya realizado ninguna consulta antes de promover esta medida.

“Dentro de la Municipalidad funciona una mesa de diálogo y en ningún momento se contempló poner este tema en debate. Es decir que a los entes consultivos se los pasó por alto y ahí radica también parte de nuestra molestia. Lamentablemente nos enteramos de estas medidas por casualidad”, afirmó.