La Parroquia San Francisco se convirtió en el nuevo centro de recepción de ayuda para los damnificados de Tartagal. Hasta el martes en Libres del Sud 299, los miembros de Red Solidaria junto a la comunidad franciscana recibirán donaciones de 9 a 12 y de 18 a 21.

Mientras guardan las bolsas que acaban de bajar del camión, el párroco Federico Rodríguez junto a Analía, Cintia, Viviana y Andrés, algunos de los miembros de la Red se sorprenden de la respuesta de la gente que "enseguida ayuda cuando hay necesidad". Y aclaran que ahora se requieren pañales, alimentos no perecederos, agua, leche en polvo, medicamentos, ropa y zapatillas en buen estado.

El párroco se refirió a la situación en Tartagal debido a la relación que tiene la congregación en esa localidad, donde tiene una parroquia. Asimismo brindó precisiones acerca de cómo se hará la logística para que llegue a destino la ayuda de los marplatenses.

"Se juntaron dos situaciones. Por un lado nosotros nos enteramos directamente de la situación de Tartagal porque una de las parroquias franciscanas nuestras está en el centro de la ciudad, que es La Purísima", comenzó explicando Rodríguez. En ese lugar está el padre Francisco Bagasur  que hasta el anteaño pasado estuvo en Mar del Plata.

"Como somos frailes de la misma provincia franciscana, él se comunicó directamente con nosotros. A partir de ahí comenzó nuestro trabajo", a lo que añadió: "Aparte nosotros vamos todos los años a misionar allá, así que conocemos el lugar y tenemos mucho contacto y la comunidad, mucha solidaridad".

A los franciscanos se sumó la Red Solidaria -que recién se está conformando en Mar del Plata-, "y justo desde Tartagal nos contaron que la Red también está trabajando con ellos allá, entonces se conectó todo", resumió el párroco.

Ayer se comenzó a recepcionar la ayuda que llegó de lo que había quedado de la Catedral y de diferentes parroquias de la ciudad, "todo esto excede a las organizaciones porque la gente se entera y trae", dijo.

La empresa El Trébol ya dispuso un camión para trasladar las donaciones a Tartagal que estiman saldrá de la ciudad el miércoles.

Rodríguez dijo que desde la ciudad salteña les piden que "no llevemos más colchones porque no hay lugar donde ponerlos por la cantidad de barro que hay" y lo que se necesita es: agua, pañales, leche en polvo, alimentos no perecederos, leche en polvo y ropa.

"La problemática que nos trasmiten día a día más allá de lo que dicen los medios, es que ahora el inconveniente mayor es la humedad y las infecciones. Se está vacunando a la gente con la cuádruple y la antitetánica porque muchos salieron apenas pasó el alud, se lastimaron e incluso sabemos que hay gente que está siendo operada porque están con infecciones grandes", comentó Rodríguez quien recibe noticias diarias de sus colegas franciscanos.

Por otro parte relató que en Tartagal resulta difícil distribuir la ayuda, "por eso nos piden que si hay gente disponible para ir a sacar el barro y asistirlos, sería bueno sumarse".

En la actualidad, la gente no quiere abandonar sus casas por miedo a los saqueos, por eso también se organizan ollas populares.

Por último se pidió también a la gente que quiera colaborar con palas y material de limpieza lo haga acercándolo a la Parroquia San Francisco en los horarios citados.

Se juntaron tres acoplados y un colectivo

Una vez más las comunidad marplatense mostró su solidaridad con quienes necesitan una ayuda y así lo pudieron comprobar los integrantes del centro de residentes salteños "Martín Miguel de Güemes" al tener que cerrar la campaña en el mediodía de ayer de ayuda a los damnificados de Tartagal. Esto es porque sobrepasaron toda posibilidad de transportar todos los elementos recibidos.

Fueron completados tres acoplados semirremolques y un colectivo con las donaciones que acercaron desinteresadamente los lugareños y turistas. A esa hora, el presidente de la entidad, Gustavo Escribas, se encontraba en el palacio municipal gestionando un transporte para trasladar el excedente que recibieron en la puerta de la Iglesia Catedral hacia el otro punto de recepción, en la Parroquia San Francisco (ver aparte). La comuna se comprometió con dos camiones para trasladar los más de mil bultos que había en el templo mayor de la ciudad.

Escribas consideró a la campaña como exitosa, "nos sorprendió cómo ayudaron" y tras mostrar satisfacción dijo que "agradecemos a toda la comunidad por lo que han colaborado con nuestros hermanos que tan mal la están pasando". La tragedia sufrida por los salteños caló hondo en el marplatense que masivamente se lanzó a colaborar con esta gente que ha perdido todo. Situación que se repite con tres años de diferencia y que podría reiterarse porque las condiciones climáticas, si bien mejoran, una fuerte tormenta podría echar por tierra lo poco que se ha mejorado la situación hasta le momento.

El primero de los camiones dado gratuitamente por Expreso Diagonal partió el jueves por la noche hacia la Casa de Salta en Buenos Aires y los otros dos semirremolques lo harán pasado mañana. Desde el centro de residentes solicitaron que no les acerquen más elementos allí, sino que lo hagan en la citada parroquia.

Estimó el presidente del centro de residentes salteños que se juntaron unos 100 colchones, camas y 70 mil kilos de alimentos, leche en polvo, pañales, ropa, entre otros. El primer camión que partió de nuestra ciudad llegó ayer a las 8 a la Casa de Salta en Capital Federal y al mediodía esos elementos estaban partiendo hacia la zona del desastre.