Pablo Falcone

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El representante del Instituto Latinoamericano de Seguridad Democrática, Alberto Binder, aseguró que el nuevo Código Municipal de Justicia busca "solucionar el pedido de la gente de tener una justicia más cercana".

En una entrevista con LA CAPITAL, el especialista en seguridad afirmó que a partir de ahora "el municipio va a poder prestarle a la población un servicio de justicia" y contó cómo funcionarán las nuevas Casas de Justicia barriales y el rol que tendrán los jurados vecinales y los vecinos pacificadores.

El anteproyecto presentado por el intendente Gustavo Pulti, que deberá ser aprobado por el Concejo Deliberante, reconvertirá la Justicia de Faltas para que pueda intervenir en distintos tipos de conflictos. Por ejemplo: ruidos molestos, problemas de medianeras, diferencias en la convivencia barrial y abuso del espacio público. Pero no sólo eso: también intermediará en problemas de mantenimientos de casas, uso responsables de mascotas y hasta pequeños contratos de la vida cotidiana.

- ¿En qué etapa del rediseño de la seguridad marplatense se ubica el Código Municipal de Faltas?

- Esto se integra con la totalidad del plan que se viene desarrollando en los últimos dos años. Ese plan se funda en la idea de que el Municipio no podía ya no ser un protagonista principal en todas las dificultades que tiene la sociedad marplatense para gestionar sus conflictos, lidiar con la violencia, evitar las formas de abusos de poder y todo lo que tiene que ver con esto que llamamos la paulatina construcción de una sociedad violenta y de una cultura de la violencia. Frente a eso, hay una primera etapa en la cual se lanza el proceso de creación de la Secretaría de Seguridad Municipal con el actual control que se viene desarrollando. Una segunda etapa fue todo el desarrollo de la Policía local que ya está en marcha. Y esta es la tercera pata donde se debe acompañar este proceso con una redefinición muy profunda del modelo de la Justicia de Faltas.

- ¿Cómo es el modelo tradicional de Justicia de Faltas?

- Tradicionalmente la Justicia de Faltas está vista como una justicia que sanciona faltas administrativas. Es decir, casos de constataciones y si en esas constataciones hay una infracción a una ordenanza municipal se impondrá una multa. Esto va a seguir siendo así.

- ¿Entonces cuál es el cambio que habrá con este nuevo Código de Justicia Municipal?

- El cambio fundamental que hay es que ahora el municipio va a poder prestarle a la población un servicio de justicia. ¿Qué significa un servicio de justicia? La creación de un conjunto de instancias institucionales para que la conflictividad de la propia sociedad tenga un lugar a donde ir.

-¿El Código de Justicia Municipal viene a solucionar el pedido de los marplatenses de tener una justicia más cercana?

-Sí. Sin dudas. Claro que este anteproyecto responde a un reclamo que hoy existe porque hay un vacío en la conflictividad de base, que nosotros le llamamos de manera impropia de menor cuantía. La gente en los momentos iniciales de la conflictividad no tiene a dónde recurrir porque las justicias provincial o federal no llegan a esos lugares. Entonces, el Municipio va a ocupar ese lugar redefiniendo la Justicia de Faltas en una Justicia Municipal y desarrollando su propio sistema donde van a seguir existiendo las faltas, pero se abren estas instancias.

- ¿Hasta dónde llegará la competencia de la Justicia Municipal?

- De un modo compulsivo, por ahora para evitar generar distorsiones o discusiones que no hacen al meollo de lo que hay que instalar en una primera etapa, va a llegar a los límites del Código de Justicia de Faltas. Ahora, el nuevo Sistema de Justicia Municipal abre dos instancias. Una es la de conciliación, que es voluntaria y son casos que podrían llegar a otro tribunal pero si el sistema de conciliación sirve se podría evitar. Por ejemplo, se puede tener un conflicto laboral que correspondería a la Justicia Laboral pero se puede ir a la Casa de Justicia y ahí resolverlo si se hace un acuerdo válido. Y en segundo lugar tampoco impide que se pacte aún cuando no se trate de un proceso de conciliación, pero por cercanía o gratuidad se convenga ir a la Justicia Municipal. Entonces, la competencia que tendrá será variable. Un poco la apuesta del diseño que tenemos es que a medida que se vaya instalando, descentralizando y vaya siendo eficiente y cercana, vaya ganando competencia voluntaria.

-¿La Justicia Municipal podría tener competencia en algunos casos penales?

- En principio, no.

- ¿Tampoco en los casos de pequeños daños?

- Sería lo ideal. En la Justicia Penal hoy en día hay una franja de daños pequeños que tienden a ser desestimados. Y está bien que se los desestime porque la Justicia Penal tiene bastante con ocuparse de drogas, homicidios, etc. Esa franja de conflictividad pequeña como daños, insultos o pequeñas peleas, lo ideal sería que lo capte la Justicia Municipal porque saturan a la Justicia Penal. Además que sea pequeño no quiere decir que el conflicto no exista sino que ese conflicto se queda sin resolución.

- Además este tipo de conflictos sin solución puede agravarse y hasta terminar en un homicidio.

- Es cierto que puede escalar. Y hoy todas las justicias penales nuevas del país abren una instancia de conciliación para este tipo de conflictividad con lo cual nada impediría que lo haga la Justicia Municipal.

- ¿Qué instancias nuevas tendrá este rediseño de la Justicia de Faltas?

- Esta actividad de juzgar, en algunos casos, y conciliar, en muchos otros, no está solamente en los jueces de faltas sino en dos instancias nuevas. Una de ellas son los vecinos pacificadores, que es una lista de personas que percibirán algún tipo de capacitación y por lo tanto van a estar dispuestas gratuitamente a dar un servicio de ayuda en sus barrios para resolver los conflictos. La otra son los jurados, que también es una lista voluntaria de ciudadanos con ciertos requisitos.

- ¿Cómo van a funcionar las Casas Municipales de Justicia?

- Todos estos mecanismos, juez, jurados, vecinos pacificadores, se los va a instalar en las Casas Municipales de Justicia, donde van a estar distintas instituciones. Ahí el vecino va, si puede concilia, si no puede hará el juicio con jurados o con el juez de faltas. También ahí el vecino podrá tener un servicio jurídico de orientación.

- ¿Tienen algo nuevo las Casas de Justicia que se instalarán en Mar del Plata?

- Lo nuevo aquí en la Argentina es que lo asume el municipio como una red muy extendida y como una política que no es solamente generar un modelo de conciliación sino un nuevo Sistema Judicial Municipal.

- ¿Cuántas Casas Municipales de Justicia se instalarán en la ciudad?

- El proyecto no tiene límites. Los límites son los que razonablemente pongan los circuitos de los barrios y de conflictividad que exista en la ciudad. Esto hay que ir haciéndolo de a poco. Lo que el intendente se compromete es a hacer toda esta reingeniería en el Tribunal Municipal y construir de dos a seis Casas de Justicia para empezar. Esto después seguirá creciendo. Mar del Plata se caracteriza por tener muchas sociedades de fomento y calculo que lentamente se les irá adosando una Casa de Justicia.

- ¿Cómo será el funcionamiento del jurado vecinal?

- El jurado se va a componer con personas mayores de 21 años. A diferencia del jurado penal que se lo elige por sorteo, en este caso lo que se va a tratar de hacer en cada Casa de Justicia es una lista de vecinos voluntarios que quieran ser jurados y que podrán ser citados una o dos veces por año. Después lo que se hace es un juicio simple, donde el accionante dirá lo que le parece, si tiene prueba la presentará y el demandado dirá lo suyo y luego el jurado determinará la responsabilidad o no y podrá sugerir medidas o distintas sanciones.

- ¿En qué casos de la vida cotidiana el vecino va a poder ir a una Casa de Justicia?

- Los casos que tenemos son de abuso de la convivencia ya sea por ruidos, mal trato de la basura, problemas de vecindad, medianería y todos los problemas que se puedan tener en el barrio por molestias que causa un vecino u otro y que va irritando a la población. También por todo lo que signifique abuso en el espacio público, que a veces está copado de una manera agresiva por grupos y necesita una regulación. Además están contemplados los daños que tienen que ver con el mantenimiento de las casas, roturas, jardines y el uso responsable de mascotas y daños ambientales, entre otras situaciones de la vida cotidiana.

A todos ellos se le suman áreas en las que hoy no hay ninguna instancia como por ejemplo los incumplimiento de pequeños contratos para los casos cuando no se cumple un pequeño servicio que puede ser por ejemplo de plomería.