La foto de los presidentes y los Reyes de España, con el mar de fondo, estará publicándose hoy en centenares de diarios, en otra promoción increíble para Mar del Plata, que una vez más demostró haber estado a la altura para organizar un acontecimiento de tal envergadura. A la hora del balance, la delegaciones extranjeras y los organizadores de la Argentina coinciden en destacar que todo salió a la perfección y que Mar del Plata, como ya ocurriera hace cinco años con la Cumbre de las Américas, demostró una notable capacidad para albergar este tipo de acontecimientos. "Después de esta prueba de fuego podemos organizar una cumbre por año", bromeó un alto diplomático de la Cancillería argentina que, admitió, sólo durmió siete horas en los últimos tres días.

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Aún ayer a la mañana resonaban los ecos de lo que había sido la cena de gala realizada en el imponente salón circular del NH Gran Hotel Provincial. Además de los presidentes y Reyes participaron todos los ministros del Gabinete nacional, empresarios, gremialistas e invitados especiales. Desde el director cinematográfico Tristán Bauer hasta el sindicalista Hugo Moyano, desde Estela de Carlotto hasta Héctor Méndez de la UIA, más de 500 personas disfrutaron de ese acontecimiento.

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"La personalidad de Lula es increíble", coincidían en señalar, ya por la madrugada en el lobby del Hermitage Hotel, los máximos representantes de las naciones sudamericanas. Lula, a quien ayer homenajearon ya que en enero culminará su mandato presidencial en Brasil, no dudó en abandonar el protocolo en cada momento que pudo. En la misma calle se sacó fotos con marplatenses y turistas, y en la puerta del NH Gran Hotel Provincial abrazó al portero, que lucía su galera, y le prometió que le iba a mandar la foto. A su paso, el jefe de fotografía de la Presidencia de Brasil repartía tarjetas personales para poder cumplir con lo prometido por el jefe de Estado del vecino país.

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El secretario general de la CGT, Hugo Moyano, dialogó con LA CAPITAL en el marco de la XX Cumbre Iberoamericana. Concretamente se lo consultó sobre el diálogo social.

"Todavía no empezó el diálogo pero sí hay buenos síntomas. Hoy estuve presente por una invitación que me hicieron de la Unión Industrial Argentina y seguimos conversando. Tenemos muy buena relación con el presidente Héctor Méndez y con el resto de los miembros, y seguiremos conversando. Anda bien y creo que vamos a tener un buen desarrollo del diálogo y un buen resultado del mismo", sostuvo.

En otro aspecto, expresó que ninguna organización obrera ha pedido la reapertura de las paritarias para esta época del año. "De todos modos -aclaró- eso lo decide cada organización, no lo decide la CGT".

Moyano también se refirió a los documentos secretos que se conocieron de Estados Unidos. Dijo a LA CAPITAL que "esto muestra que el gobierno lleva una doctrina que instaló el general Juan Domingo Perón en 1946 y que es la unidad de América latina. A muchos no les interesa que esto se produzca. Los enemigos de los pueblos no aceptan esta unidad latinoamericana que va a fortalecer la unidad del continente".

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El líder de los camioneros dijo además que veía "muy bien a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner. La veo bien, fuerte, y no dudo que debe aspirar a un nuevo mandato presidencial", expresó. En este sentido, Hugo Moyano fue claro al señalar que "esperemos que lo acepte. Es la mejor candidata que tenemos, sin lugar a dudas", expresó. Por último dijo que 2010 fue un año "importante" para los trabajadores ya que "se sigue avanzando. Todos hubiésemos deseado que fuera mejor pero se sigue avanzando". Moyano participó de la cena ofrecida a los presidentes, y ya en los primeros minutos del sábado, en un Boulevard Marítimo prácticamente desierto, admitía ante un periodista que a Mar del Plata, este tipo de encuentros la enaltecen. Tras enviar un saludo para el periodista Vicente Luis "Cholo" Ciano, Moyano admitió que en su infancia en Mar del Plata nunca hubiese imaginado ser el líder de los trabajadores argentinos y cenar a pasos del Rey frente al mar de su ciudad. "Recuerdo siempre mi infancia en Mar del Plata, que fue muy linda, a pesar de haber sido muy humilde, y realmente me emocionó ver a tantos presidentes caminando las calles de mi ciudad. Tenemos que estar todos orgullosos", especificó antes de ascender a su auto con uno de sus hijos.

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Mientras tanto, los granaderos le ponían color a la costa. Desfilando por la espectacular alfombra roja desde el NH Gran Hotel Provincial hasta el Hermitage motivaron que turistas y marplatenses pudieran obtener esa extraña fotografía. Mientras esto sucedía, el secretario general de la OEA, José María Insulza, cruzaba el Boulevard Marítimo acompañado por sus colaboradores más inmediatos, para mantener luego reuniones con distintos cancilleres.

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En la planta baja del NH Gran Hotel Provincial, a la hora del desayuno convivían, mesa de por medio, los principales colaboradores y ministros de los distintos presidentes presentes en Mar del Plata. El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y el canciller Héctor Timerman degustaban medialunas mientras a través del Blackberry leían distintos informes. A un paso el ministro de Salud charlaba telefónicamente al tiempo que los custodios del Rey y de la presidenta Argentina charlaban animadamente antes de iniciar otra jornada intensa de actividades. En casi todas las mesas, LA CAPITAL aparecía como el diario de lectura, con toda la información y la edición de un suplemento especial sobre esta histórica cumbre.

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A todo esto, en el hall del Provincial, poco antes de las 10, era inusual el movimiento. En esos momentos arribó al citado establecimiento hotelero el presidente de Chile, Sebastián Piñera. Fue el último mandatario en llegar a Mar del Plata. Fue recibido por el intendente municipal Gustavo Pulti, quien le dio la bienvenida a Mar del Plata, y también por el empresario Florencio Aldrey, con quien departió durante algunos minutos. Piñera apenas tuvo tiempo de pasar por su suite, la 436, ya que estaba todo listo para que comenzara el plenario de los presidentes y jefes de Estado. En consecuencia, rápidamente llegó hasta el Salón de las Américas del primer piso donde se abordaron interesantes cuestiones para todos los países de la región.

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Anteanoche, en tanto, Rafael Correa, presidente de Ecuador, arribó poco después de las 23 al Hotel Hermitage. Allí mantuvo un breve diálogo con LA CAPITAL y concretamente se lo consultó acerca de la difusión de los cables secretos de Estados Unidos. "Hemos pedido un informe a nuestros servicios de inteligencia para que nos hagan una consolidación de la información existente y después de analizar profundamente las cosas tomaremos una decisión. Todavía no podemos adelantar un criterio", confió. "En una reunión futura -expresó ante otra consulta- se elegirá al sucesor de Néstor Kirchner al frente de la Unasur". En este sentido, en el hall del hotel, y acompañado por uno de sus hijos, Correa dijo que "realmente, todavía estamos muy golpeados por la partida tan prematura de Kirchner". Finalmente, ante otra pregunta de LA CAPITAL, y al recordársele que fue precisamente en Mar del Plata donde Kirchner tuvo un papel muy importante contra la aplicación del ALCA, Correa sostuvo que "en ese tiempo, yo no existía en el ámbito político, pero por supuesto que ese fue un hecho histórico".

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El Rey Juan Carlos de España dialoga informalmente con la presidenta de Costa Rica Laura Chinchilla Miranda, en el NH Gran Hotel Provincial, donde ayer se concretó un hecho sin antecedentes en la historia de ese establecimiento. ---

Nunca en su historia, el Hotel Provincial, verdadera postal de Mar del plata, albergó en un solo día a tantos presidentes, cancilleres y autoridades políticas internacionales. Ayer se concretó la jornada más fuerte de la XX Cumbre Iberoamericana, y el Salón de las Américas albergó a las máximas autoridades de la región en un rico debate, donde, entre otras cosas, se aprobó una cláusula democrática con el objetivo de disuadir golpes de Estado en la región. Además, hubo un reconocimiento para el presidente de Brasil Lula da Silva y para el ex presidente Néstor Kirchner.

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Mientras se desarrollaban las deliberaciones tanto a la mañana como por la tarde, los presidentes también se retiraban por algunos minutos del salón, para sorpresa de quienes, transitando los pasillos del NH Gran Hotel Provincial por ejemplo, sorpresivamente se podían encontrar con el presidente de Chile Sebastián Piñera -debutante en este tipo de encuentros-, leyendo un resumen de prensa de su país, con el colombiano Juan Manuel Santos dialogando por teléfono o con el Rey Juan Carlos de España y la presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla Miranda.

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Lula da Silva no estuvo presente en la foto oficial tomada poco después de las 14.30. El presidente de Brasil abandonó al mediodía la ciudad y los que se sorprendieron fueron los vecinos de la avenida Constitución, que vieron pasar su automóvil con los vidrios bajos. De hecho, Lula saludó más de un vez por la ventanilla. "La foto oficial la tendríamos que haber sacado a media mañana, en un alto de las deliberaciones", se lamentó uno de los organizadores de este tradicional evento.

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Más de 200 motos se encontraban estacionadas en la costa, poco después del mediodía, listas para secundar a las comitivas presidenciales hasta el aeropuerto de Camet. El operativo de seguridad lentamente se fue levantando a medida que se retiraban los mandatarios internacionales. Desde el comando que se montó frente al NH Gran Hotel Provincial, se indicó que el operativo fue más que exitoso. "Respiraremos aliviados recién cuando se vaya el último acreditado", aseguraron.

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La Presidenta de la Nación, durante el plenario, dialogó en varias oportunidades con sus colaboradores más inmediatos, especialmente el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, y el de Interior, Florencio Randazzo. Asimismo, mantuvo un par de contactos telefónicos con familiares directos y se le alcanzaron distintos informes para leer mientras exponían algunos de sus colegas. Se emocionó Cristina Fernández en un par de oportunidades, cuando recordaron a Néstor Kirchner, y admitió que la Cumbre fue un éxito a nivel organizativo, lo cual llenó de orgullo al personal de la Cancillería.

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Los presidentes, tras haberse tomado la foto oficial, almorzaron solos, sin cancilleres ni colaboradores, en una de las reuniones ya tradicionales en estas cumbres. Según trascendió, es donde los jefes de Estado dialogan con menos ataduras y sin tantos formalismos. Allí, Fernando Lugo, presidente de Paraguay, volvió a insistir en lo importante que sería para su país que el año próximo concurran todos los mandatarios de la región a la XXI Cumbre Iberoamericana a realizarse en Paraguay, cuando celebre su bicentenario.

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Mientras esto sucedía en el NH Gran Hotel Provincial, medio gabinete presidencial cruzaba de calle y decidía almorzar en el restaurante del Hermitage Hotel. Allí repusieron energías el ministro de Economía Amado Boudou, quien compartió la misma mesa del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, el secretario Legal y Técnico de la Presidencia Carlos Zanini, el ministro de Salud, Juan Manzur y el secretario de Gestión Pública Fernando Abal Medina. Todos ellos poco antes de las 16 retornaron al NH Gran Hotel Provincial para seguir colaborando con la Presidenta en el tramo final de la Cumbre.

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