Ante el escenario de mayor riesgo ambiental a causa de la contaminación y el cambio climático, el sector salud está tomando medidas de compromiso con la idea de ocupar un rol destacado como promotor de la prevención en salud ambiental, y el cambio de prácticas e insumos médicos que generan daños al ambiente.

El Hospital Italiano de Rosario, en el que se implementaron medidas para cuidar la salud ambiental, es un caso testigo de lo que pueden lograr los hospitales cuando también pasan a preocuparse por las causas de las enfermedades y no sólo por las consecuencias.

El Dr. Néstor Herrera, jefe del Servicio de Neonatología del Hospital Italiano Garibaldi, de Rosario, provincia de Santa Fe, indicó en relación a las acciones que implementaron en ese nosocomio, para promover un ambiente más saludable, que "se colocaron lámparas de bajo consumo en todos los sectores, se organizó el manejo de los residuos hospitalarios, se eliminaron los termómetros con mercurio del servicio de neonatología, y los tensiómetros de mercurio en todo el hospital. De este modo, se fortaleció el compromiso de los trabajadores con la salud ambiental. Creemos que el hospital es un lugar clave en la comunidad para la capacitación y difusión de acciones que favorezcan la salud ambiental".

Por su parte, Verónica Odriozola, coordinadora regional de Salud sin Daño, concluyó que "es tiempo de que el sector salud responda a la realidad del cambio climático, adoptando un liderazgo moral pero también palpable en la exigencia a los gobiernos para que tomen las decisiones adecuadas en la reducción de emisiones de invernadero, estando mejor preparados frente al aumento de enfermedades, pero también cambiando sus propias prácticas para reducir su contribución al deterioro del clima".