A pesar de que se prohibió expresamente por ordenanza la actividad de los limpiavidrios, muchos de los cuales son agresivos contra los automovilistas, igual siguen actuando en esquinas muy transitadas y a la vista de inspectores y policías.

LA CAPITAL planteó esta realidad al subsecretario de Control Adrián Alveolite, quien aseguró que no existe por parte de la Municipalidad "ninguna clase de tolerancia" con la actividad que realizan los limpiavidrios y sostuvo que durante las últimas semanas la dependencia, con el auxilio de las fuerzas policiales, realizó numerosos procedimientos para retirar a estas personas de las esquinas.

Si bien el funcionario dijo que existe un "aspecto social" a tener en cuenta, la comuna "no actúa con flexibilidad" ante quienes cumplen con esta tarea entorpeciendo el tránsito y generando ciertos desórdenes en la vía pública. Según dijo, el hecho de que los limpiavidrios permanezcan en esquinas neurálgicas de la ciudad como la de Colón y Córdoba o Saavedra y la costa obedece más bien a que "no resulta sencillo" para el municipio erradicar una actividad compleja de combatir.

-¿Cuál es la visión que esta gestión tiene respecto de la actividad de los limpiavidrios?, le preguntó LA CAPITAL a Alveolite.

-Nosotros estamos trabajando activamente junto a fuerzas policiales para velar por el cumplimiento de la ordenanza 15.213 que está vigente desde 2003 y que prohíbe la presencia de limpiavidrios en las esquinas. Al detectar la actividad se labran actas contravencionales y se secuestran los elementos utilizados para realizar esa tarea.

-Lo cierto es que al recorrer las calles se advierte que están presentes en muchas esquinas. ¿Esto se debe a que se está teniendo algún grado de tolerancia?

-No hay ningún grado de tolerancia ni mucho menos. Desde el Estado municipal se hace un esfuerzo permanente para tratar de desarticular a una actividad que existe y que genera molestias y desorden.

-¿Entonces por qué no se advierten resultados más claros?

-El problema es que si, por ejemplo realizamos un operativo en horas de la mañana, nos encontramos con que por la tarde los limpiavidrios se encuentran nuevamente emplazados en el lugar. Pese a tener una presencia activa el control de esto exige un esfuerzo muy importante en recursos y horas de trabajo. No obstante la tarea no se concentra solamente en el control porque también hay que admitir que detrás de esto existe una problemática social que la Municipalidad no se puede desatender. Por eso se intenta siempre gestionarles a estos trabajadores informales una posibilidad de capacitarse en oficios. A través de diferentes programas les tratamos de brindar la posibilidad de insertarse laboralmente e inscribirlos en la oficina de empleo para que tengan un trabajo.

Procedimientos

todos los días

El área de control del municipio realizó durante lo que va de este año a razón de un procedimiento diario para tratar de hacer cumplir la ordenanza que prohíbe la presencia de limpiavidrios en la vía pública. Según los datos suministrados por el propio municipio, entre el 1 de enero de 2010 y ayer fueron labradas unas 140 actas en las intersecciones de diferentes calles y avenidas.

En las planillas que resumen los detalles de los procedimientos, se advierte que los apellidos de los imputados nunca se repiten, lo que hace suponer que cuando son infraccionados por los inspectores, falsean sus identidades. Otra información llamativa es la que describe el secuestro de los elementos utilizados por los limpiavidrios para realizar su actividad. Allí se indica que durante este año la Municipalidad ya recolectó más de 300 objetos entre baldes, cepillos, secadores, escurridores y tachos que actualmente permanecen en el depósito de la Dirección de Inspección.