El INTA logró crear una leche con efectos antitumorales y antidiabéticos
La alimentación estratégica de los vacunos posibilitó el descubrimiento. Como resultado, la leche producida contribuye a atenuar enfermedades degenerativas.
BALCARCE (Corresponsal)
Luego de seis años de trabajo, técnicos del INTA Balcarce, en colaboración con el INTI Lácteos, lograron crear una leche más saludable que tiene cualidades antitumorales y antidiabéticas.
Este resultado se logró mediante la alimentación estratégica de vacunos y caprinos, cuya alimentación fue suplementada con oleaginosas, aceites y derivados.
De esta manera, los especialistas obtuvieron una leche de menor contenido graso, con su fracción hipercolesterolémica atenuada y con mayores niveles de ácido linoleico conjugado (CLA) y ácido vaccénico (AV).
Según informaron, a partir de la alimentación estratégica de vacas y cabras lecheras, una línea de trabajo del Programa Leches realizado permitió obtener un producto de bajo poder aterogénico naturalmente enriquecidos en moléculas con propiedades benéficas sobre la salud de los consumidores.
Entre dichas propiedades se destacan los efectos antitumorales y ateroprotectores demostrados en animales de laboratorio y líneas de células tumorales humanas in vitro.
?Estos lácteos no deben verse como un medicamento, sino como una medida preventiva que funciona como un eslabón más en un contexto de hábitos saludables de vida?, aclaró Gerardo Gagliostro, del grupo Nutrición, Metabolismo y Calidad de Producto del INTA Balcarce.
El ingeniero reflexionó que ?es un alimento más que puede contribuir a atenuar la aparición de enfermedades degenerativas en los consumidores?.
Por su parte, el coordinador del Programa Nacional Leches del INTA, Miguel Taverna, indicó que el objetivo de estas investigaciones fueron ?aumentar la calidad integral de la leche para darle un carácter más funcional y generar productos con mayor valor?.
Taverna explicó que los resultados han sido ?muy alentadores?, por lo que ?se espera pasar a una etapa comercial para hacer un desarrollo con una empresa privada?.
Cualidades
Diversos trabajos publicados por el equipo INTA-INTI demostraron que estas propiedades benéficas presentes en la leche cruda se mantienen intactas en leches pasteurizadas, el yogurt y quesos crema.
?En la medida en que los estudios biomédicos confirmen las propiedades antitumorales y antiaterogénicas, podría imaginarse la existencia de un tambo medicinal utilizando a la vaca lechera o a la cabra como usina para la síntesis de esta familia de moléculas bioactivas, su extracción a partir de la grasa láctea y el posterior encapsulado con fines farmacológicos, como se hace actualmente con los ácidos grasos omega tres de origen marino?, expresó Gagliostro.
El técnico de Balcarce aseguró que ?estudios conducidos en los Estados Unidos, Francia y en otras partes del mundo sugieren efectos muy promisorios en cáncer de mama, tanto en ensayos conducidos con ratas como sobre células humanas cultivadas in vitro?.
El especialista propone un consumo de 0,8 g/día de CLA, el cual podría ejercer un efecto terapéutico sobre el cáncer en una persona de unos 70 kg.
?El relevamiento bibliográfico sugiere que el cáncer mamario es uno de los más sensibles al efecto citotóxico de estas moléculas?, dijo Gagliostro, quien se refirió a estudios que ?demuestran una asociación negativa entre incidencia de cáncer mamario y consumo de lácteos, sobre todo de aquellos lácteos que son producidos en condiciones de alimentación pastoril?.
Derivados
Asimismo, se comprobó que el consumo de unos 90 gramos de queso sardo argentino o unos 140 gramos de queso Tybo argentino producidos en Chivilcoy con la leche alto CLA obtenida en el tambo experimental del INTA Balcarce permitiría alcanzar la dosis juzgada como protectora contra el cáncer y sobrepasar la dosis ateroprotectora.
Gagiostro precisó que otro beneficio está relacionado con ?una menor área aórtica afectada por ateromas en animales de laboratorio alimentados con lácteos alto CLA y sometidos a un desafío hipercolesterolémico, lo que reduce el riesgo cardíaco.
Por otra parte, aclaró que ?los efectos adelgazantes o antiobesidad no están claramente establecidos ni aceptados aún en el ser humano?.
De acuerdo con lo informado por Gagliostro, ?las últimas investigaciones se basaron en incorporar derivados de soja en la dieta de las vacas lecheras, en un proyecto que implica intervenir en la cadena de valor que va de la soja a la leche?.
En esto se trabajó junto a un tambo aplicador de la tecnología en Chivilcoy, donde funciona una planta de extracción de aceite y que cuenta con un producto de descarte de esa industria denominado borra de la soja.
?Si se lo transforma en un alimento para las vacas lecheras se pueden obtener lácteos funcionales y contribuir a su vez en protección medioambiental ya que en caso de no ser correctamente procesada dicha no puede ser eliminada en forma directa sin un proceso previo de solubilización. También es conocido que la digestión ruminal de los lípidos no genera metano cuya liberación a la atmósfera por parte de los rumiantes puede contribuir a acentuar el efecto invernáculo?, concluyó Gagliostro.