El cerramiento instalado la semana pasada en la calle Balcarce entre Tierra del Fuego y Perú, si bien ayer apareció parcialmente destruido por manos anónimas, continúa impidiendo el tránsito vehicular.

Se trata de uno de los tres paredones de ese tipo que se levantaron en inmediaciones de los edificios que años atrás fueran construidos por la Asociación de Viajantes en un predio del barrio Sarmiento en el que antes funcionó el Club Español.

Los cerramientos de Perú casi Balcarce y de Balcarce y México, en tanto, no fueron dañados. Como se recordará, la semana pasada los vecinos del lugar se manifestaron sorprendidos por la decisión adoptada por los consorcistas de esas torres; luego de expresar que no tenían derecho a cerrar calles que 19 años atrás fueron abiertas al tránsito vehicular y peatonal, estuvieron en el Municipio adonde plantearon la cuestión al subsecretario de Gobierno, Pablo García. Para fundamentar su postura, exhibieron fotocopia de la escritura por la cual, en su momento, tanto la mencionada entidad como los adjudicatarios de los departamentos se obligaron a transferir al dominio público las partes previstas para la prolongación de las calles Perú y Balcarce; también de la ordenanza que autorizó al Departamento Ejecutivo a materializar la transferencia al dominio público y la recepción de las fracciones de terreno correspondientes a la prolongación de las calles: Balcarce, entre Tierra del Fuego y México -apertura vehicular y peatonal-; Perú hasta Balcarce, desde 11 de Septiembre -apertura vehicular y peatonal- y Perú entre Balcarce y Libertad -apertura peatonal transitoria-.

Cabe señalar que, pese a lo expuesto, los consorcistas iniciaron un expediente orientado a lograr la restitución de las tierras y que después, en asambleas que concretaron por separado, resolvieron llevar adelante el cierre de las mencionadas calles.