Quieren la apertura de un boliche frente al mar
El ex edificio del Inidep podría albergar una disco si se autoriza la petición, ya que en la licitación de la estructura se prohibía explícitamente esa actividad.
El complejo La Normandina requirió autorización en el Concejo Deliberante para habilitar un boliche en su superficie. La petición, aunque no está contemplada en los pliegos de bases y condiciones (PBC), se basa en el probable traslado de los bares de la zona de Alem a la escollera Norte.
La solicitud de "ampliación de los rubros concesionados" ingresó al Concejo Deliberante el miércoles pasado, rubricada por el apoderado de la firma doctor José Ignacio Fernández Monteverde, y fundamentó el pedido de ampliación en la multiplicación "de la inversión comprometida".
"La nueva realidad -resaltó el escrito- multiplicó la inversión comprometida, alterando la ecuación económica-financiera del proyecto y la rentabilidad del mismo".
Cabe recordar que en julio de 2004, la empresa "La Normandina SA" tomó posesión del edificio ubicado en Playa Grande (más conocido como el ex Inidep) y realizó una serie de mejoras para la puesta en valor y explotación del inmueble.
El 27 de mayo del señalado año, el Honorable Concejo Deliberante autorizó al Ejecutivo municipal a adjudicar el viejo edificio a la empresa que montó un centro recreativo gastronómico. La obra habría demandado una inversión cercana a los 5 millones de pesos.
El ex edificio del Inidep fue traspasado hace aproximadamente siete años a la órbita municipal. La empresa, entonces, presentó una propuesta que le permitió participar en la posterior licitación, en la que figuró como único oferente.
Debido a que fue la única empresa que se presentó, el HCD debió decidir -de acuerdo a la Ley Orgánica de las municipalidades-, el otorgamiento del predio a "La Normandina SA" en concesión.
"No se va a convertir en un local bailable", afirmaron en su oportunidad los voceros de la empresa "La Normandina SA", al ser consultados por el uso que se le daría al viejo edificio.
"Habrá actividades diurnas y nocturnas, todo lo que tenga que ver con el mar, el puerto y con distintas posibilidades que otorga el edificio porque tiene diversidad de salones como para el desarrollo de varias actividades", habían detallado.
Nuevo espacio
En el pedido se destacó que "no se trata de una ampliación del proyecto original, sino de un nuevo espacio producto de un requerimiento estructural impensado, sin el cual aquel proyecto hubiese naufragado ya que era de imposible ejecución", debido a las malas condiciones en las que se encontraba el edificio.
Así las cosas, ese nuevo espacio se destinaría a una confitería bailable, teniendo en cuenta el proyecto de la Municipalidad local "de licitar el desarrollo de la estructura básica" para el tan mentado traslado de los bares de la zona de Alem.
En ese sentido, el informe destacó que "cuenta con la ventaja de tener ya construida la infraestructura" y que si bien podrían explotarla como confitería, café concert, bar musical, café literario, juegos optaron por formular "una propuesta integradora que permita generar una sinergia entre municipio, comerciantes, vecinos y los concesionarios que beneficien a todos los sectores involucrados".
Asimismo, en el pedido se aclaró que si bien en el pliego de bases y condiciones se prohíbe "el uso de cualquiera de los locales con actividad de disco o local bailable", tal prohibición "no es aplicable al pedido en tanto el mismo no refiere a los locales que define el pliego de bases y condiciones, sino a un ámbito espacial diferenciado".
Por su parte, fuentes del Concejo Deliberante consideraron que el pedido debió dirigirse al Poder Ejecutivo, para evaluar la "excepción".