Hasta el momento en Mar del Plata no hay larvas de aedes aegypti, aseguró el secretario de Salud de la Comuna Alejandro Ferro, quien de todas formas insistió en la necesidad de que toda la población se comprometa con las medidas de prevención, tendientes a evitar la presencia de ámbitos propicios para el desarrollo de las larvas de este mosquito.

"Es fundamental desterrar todos los lugares que puedan propender al desarrollo de las larvas" enfatizó el funcionario, quien aclaró que "en cualquier momento puede darse un caso de dengue importado, pero mientras no haya mosquito no va a haber epidemia en la ciudad".

Ferro adelantó que hoy participará de una reunión del gabinete social en la que se terminará de ampliar el plan de prevención que se instrumentará en los barrios de la ciudad a fin de ayudar a los vecinos a erradicar los focos que pueden propender al desarrollo de las larvas.

Se trata de todos los lugares que puedan acumular agua, como cubiertas, coches abandonados, piletas, recipientes de los que beben los animales, macetas, botellas, bolsas y todo otro elemento a la intemperie.

El referente de la cartera sanitaria recordó que por debajo de los 17 grados de temperatura se dificultan las posibilidades de sobrevida de este insecto -que además de dengue es transmisor de fiebre amarilla- "por lo que las noches frías que tenemos en la ciudad ayudan". De todas formas advirtió que "con el cambio climático no sabemos qué puede pasar", por lo que aseguró que "tenemos que trabajar mucho ahora para evitar que aparezca el mosquito el año que viene".

En cuanto al caso "sospechoso" que se dio a conocer el sábado de una paciente que ingresó al Hospital Regional, aclaró que "todavía no están los resultados de los estudios" pero adelantó que "el período de incubación no correspondía" dado que la mujer, oriunda de Berisso, había estado esa misma semana en Misiones y que los síntomas de dengue se manifiestan entre 10 y 15 días después de haberlo contraído.

En la provincia

El ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires informó que hasta el momento se notificaron 46 casos de dengue confirmados, 137 sospechosos y 71 descartados. De ellos, la cartera presumió que alrededor de 14 serían autóctonos aunque aún faltan las confirmaciones al respecto por parte del Instituto Nacional Maiztegui.

Al respecto, el director de Epidemiología de la Provincia de Buenos Aires, Mario Masana Wilson, explicó que si bien los hospitales pueden efectuar un diagnóstico preliminar de la enfermedad, es el Instituto Nacional de Enfermedades Virales Humanas “Julio Maiztegui” el único que puede confirmarlo mediante análisis específicos “de neutralización e inoculación en células de mosquito”.

El primero de esos análisis busca anticuerpos específicos contra el dengue mientras que el segundo permite detectar el virus que desencadena la enfermedad.

En tal sentido, el experto detalló que los primeros análisis que se efectúan en los laboratorios hospitalarios buscan detectar anticuerpos contra dengue, pero deben ser confirmados dado que muchas veces dan positivo porque la persona se vacunó contra fiebre amarilla o bien porque padece fiebre amarilla.

“Si esos estudios preliminares dan negativo no hay duda de que la persona no tiene dengue, pero si en cambio da positivo resulta necesario confirmarlo por los análisis específicos que se hacen en el Maiztegui de Pergamino”, explicó Masana Wilson.

En ese Instituto, dependiente del Ministerio de Salud de la Nación, se efectúan otras pruebas que finalmente detectan con precisión el virus en sangre.

Para optimizar los recursos en materia de análisis, la cartera sanitaria provincial determinó que los hospitales San Juan de Dios de La Plata, Evita Pueblo de Berazategui y Petrona V. de Cordero de San Fernando sean los encargados de efectuar los primeros análisis. De tal suerte que aquéllos que dan positivo son derivados a Pergamino para la confirmación.

El ministro de Salud provincial, Claudio Zin, indicó ayer que de la docena de casos presuntamente autóctonos “aún no hay confirmación”, e hizo hincapié en que “el eje de esta lucha no es contra los casos autóctonos ni mucho menos contra la estadística sino contra el mosquito porque, en la medida en que el aedes aegypti exista en nuestro territorio el riesgo de dengue y de los otras enfermedades que transmite va a continuar vigente”.

En ese punto recordó que la prevención consiste en descacharrizar, es decir, eliminar todos aquellos recipientes que se encuentran al aire libre y que pueden contener agua, porque es allí donde se desarrolla el vector.

Por otra parte hizo hincapié en el uso de repelente y tules para proteger a los bebés de las picaduras.

La provincia de Buenos Aires dispuso un programa de concientización para prevenir el dengue que incluye la habilitación de líneas telefónicas (0800-333-8876 y 0800-406-2727), la descacharrización en hospitales, la capacitación a secretarios de salud, directores de regiones sanitarias, directores de epidemiología de los distritos del conurbano, docentes de escuelas y promotores comunitarios.

También se distribuirán folletos explicativos a todos los alumnos de nivel inicial de la provincia de Buenos Aires con información sobre la enfermedad y las estrategias de prevención y autocuidado. La medida, adoptada a través de un convenio con la Dirección General de Cultura y Educación de la Provincia, tiene como propósito que los chicos se transformen en multiplicadores de la información en sus casas.