La campaña de vacunación contra el sarampión y la polio que lanzó la cartera sanitaria hace tres semanas y que se extiende hasta fin de octubre, se reforzó hoy en todos los centros de vacunación del país al celebrarse el Día Mundial de Lucha contra la Poliomielitis.

La vacunación está destinada a los niños menores de cinco años, aunque ya hayan sido vacunados, para prevenir nuevos brotes de esas enfermedades, precisó el Ministerio de Salud.

De este modo, todos los hospitales, centros de salud y puestos especiales intensificarán su actividad ofreciendo la vacuna sarampión-rubéola y la Sabin a los niños menores de cinco años, independientemente de su estado de vacunación.

"Esta es una campaña de dosis extra que tiene dos objetivos: reforzar el esquema de vacunación en aquellos casos en que se recibió la vacuna y el organismo no respondió, y por otro lado que accedan a la dosis aquellos que nunca la recibieron", explicó a Télam Carla Vizzotti, jefa del Programa Nacional de Inmunización del Ministerio de Salud de la Nación.

La especialista señaló que en general hay un porcentaje de los chicos que están vacunados que no responden a la inmunización y esto pasa en todo el mundo, por eso siempre se hacen campañas periódicas para la protección de esas enfermedades.

A pesar de la divulgación de la campaña la vacunación no tuvo hasta el momento la respuesta esperada porque "hay una confusión con respecto a la dosis extra, mucha gente piensa que si su hijo ya fue vacunado no necesita dársela y entonces se quedan tranquilos".

"Esto no es así, aunque se haya vacunado hace un mes necesitan la dosis extra", precisó. En este marco, se planteó reforzar la campaña tendiente a que los pediatras y los papás tomen conciencia de que se debe vacunar a todos los niños menores de cinco años.

"Para la polio, desde dos meses hasta cinco años, y para el sarampión y rubeola, desde el año hasta los cinco, se hayan vacuna antes o no", reiteró Vizzotti. La campaña busca inmunizar a más de cuatro millones de chicos, de los cuales "hay que lograr una cobertura del 95% para que estas enfermedades no se reintroduzcan en el país", enfatizó.

La funcionaria recordó que el último caso de sarampión que se registró en el país fue en 2000 y de polio en 1984, y agregó que "la causa de que estas enfermedades estén eliminadas son las coberturas elevadas de vacunación".

La poliomielitis es una enfermedad que afecta al sistema nervioso y destruye las válvulas nerviosas encargadas del control de los músculos produciendo parálisis.

Si bien la Argentina es un país libre de poliomielitis salvaje desde 1984, en abril de este año se registró un caso en San Luis por virus Sabin derivado, "una mutación del virus que tiene capacidad de generar la enfermedad", dijo Vizzotti, tras señalar que "por eso hay un riesgo aumentado de esta enfermedad".

En relación con la polio, la campaña de vacunación evitará asimismo que el virus salvaje ingrese al país desde otras regiones y que el virus sabin derivado produzca nuevos brotes.

Asimismo, en el caso del sarampión "hubo tres casos importados, relacionados con gente que vino de afuera del país, una causa que puede producir un brote", agregó la funcionaria. En la Argentina se estima que la población de niños susceptibles al sarampión es actualmente mayor a 800.000, debido a diferentes causas.

Por un lado, los niños reciben la vacuna contra el sarampión a partir del año, y por otro, las coberturas de vacunación si bien son altas en general no alcanzan el 100% y la efectividad de la vacuna doble viral, que protege contra el sarampión y la rubeola, es del 90% aproximadamente.

-Télam-