LONDRES, Inglaterra.- El alcalde de Londres, Boris Johnson, está a favor de que los niños musulmanes que estén en riesgo de ser radicalizados por sus padres sean retirados de sus familias y estén bajo el cuidado de los servicios sociales británicos.

En un artículo publicado hoy en el diario "The Daily Telegraph", Johnson consideró adecuada esta medida para impedir que los menores de edad puedan convertirse en posibles "terroristas suicidas".

El político conservador consideró que "podría haber cientos de niños" a los que sus padres les enseñan "cosas locas" y puso el ejemplo del caso de Michael Adebolajo y Michael Adebowale, los dos musulmanes que en mayo pasado asesinaron al soldado británico Lee Rigby frente a un cuartel militar en el sur de Londres.

"En la actualidad existe un rechazo por parte de los servicios sociales para intervenir, incluso cuando ellos mismos tienen evidencias claras de lo que está pasando, ya que no está claro que la ley dé soporte a esta acción", añadió Johnson en su artículo.

Según el político, "la ley debería tratar la radicalización como abuso a menores".

Johnson puso como ejemplo que un niño puede recibir atención "si ha estado expuesto a la pornografía o es víctima de un abuso, pero no si está siendo expuesto a un punto de vista totalmente sombrío y nihilista del mundo que podría llevar a convertirlo en un asesino".

El primer edil dijo que todos los días, en Londres y otras grandes ciudades, hay miles de agentes que luchan contra el terrorismo y que hacen un "trabajo fantástico" para mantener la seguridad de los ciudadanos.