ROMA, Italia.- Centenares de inmigrantes ilegales procedentes del norte de África continuaron llegando hoy a las costas italianas, adonde en las últimas 24 horas han arribado más de 1.200 personas indocumentadas, entre ellas unas 300 a bordo de la primera barcaza que llega a Italia procedente de Libia.

La barcaza, que había salido de Libia hace cuatro días y que había lanzado un mensaje de socorro debido a las condiciones precarias en las que navegaba y a los problemas que sufría en el motor, fue socorrida por las autoridades italianas y transportada a la isla de Linosa, a 42 kilómetros al noreste de Lampedusa, alrededor de las 4.

Una de las mujeres que viajaba a bordo parió en alta mar y fue trasladada en helicóptero hasta Lampedusa, donde recibió atención médica y, posteriormente, fue trasladada a un centro hospitalario de Palermo (Sicilia), mientras que otra joven embarazada abortó durante la travesía.

En las últimas horas se avistaron otras tres barcazas en aguas del Mediterráneo que podrían haber salido de Libia, informaron los medios de comunicación italianos.

El mayor flujo de inmigrantes llegó a la isla de Lampedusa, que atraviesa una situación crítica y que actualmente alberga más de 4.000 inmigrantes, de los que unos 2.000 están acampados a cielo abierto puesto que se ha superado la capacidad de los centros de acogida.

Según los datos facilitados por la unidad establecida para hacer frente a la emergencia humanitaria en Lampedusa, en la isla desembarcaron 18.501 inmigrantes desde principios de enero, frente a los 27 que llegaron en el mismo periodo de 2009.

"No hay tiempo que perder, la situación es insostenible", manifestó la portavoz en Italia del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Laura Boldrini, que señaló que "con los primeras llegadas de solicitantes de asilo de Libia, a los que seguirán muchos otros, se impone la necesidad de descongestionar Lampedusa".

El Ministerio del Interior anunció el viernes que se utilizarían embarcaciones para pasajeros para contribuir en las tareas de traslado de los inmigrantes a otros centros de Italia y que hasta el momento se habían realizado a través de vuelos especiales y de la nave militar "San Marco".

Así, hoy atracó en la isla una nave de la compañía de línea Grimaldi que evacuará, según las previsiones, a unas 850 personas.

El gobernador de la región Sicilia, Raffaele Lombardo, definió la situación de Lampedusa como "un infierno" en una conversación con el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, que recoge la prensa italiana.

"Existe un riesgo serio de epidemia", manifestó Lombardo, que refirió que las mujeres y niños no salen de casa.

En los últimos días, unos 1.500 inmigrantes de Lampedusa fueron trasladados a la llamada "aldea de solidaridad" de la localidad siciliana de Mineo, en la provincia de Catania, un antiguo complejo residencial militar que el Gobierno de Italia ha reconvertido en lugar de acogida para inmigrantes.

La mayoría de ellos pidieron asilo político aunque la polémica surgió en las últimas horas debido a que algunos de ellos escaparon del centro saltando las vallas del recinto.

En medio de esta situación de tensión varios centenares de vecinos de la localidad se manifestaron contra la gestión del Gobierno y por la apertura del centro y explicaron que no se trata de un problema de racismo, sino que no se sienten seguros y que están preocupados por el impacto que puede tener en la economía de la zona.