MIRAMAR (Corresponsal).- Hoy se cumplen 128 años de la fundación de Miramar, la localidad cabecera del Partido de General Alvarado que permanentemente sigue intentando promocionarse como uno de los centros turísticos más importantes de la Costa Atlántica.

Desde el ámbito municipal, a través del Plan Estratégico 12M, se van dando pasos hacia delante con el afán de lograr un crecimiento que genere mayor competitividad, junto al surgimiento de distintas inversiones edilicias privadas que permitieron ampliar la capacidad de alojamiento de distinta categoría.

Igualmente, hay aristas irresolutas que siguen generando vaivenes. Un ejemplo claro es la falta de un trabajo asociado y jerarquizado entre los prestadores turísticos que sea sostenido en el tiempo, sólo existen casos puntuales. Predominan los intentos individuales por sobre lo colectivo y eso a su vez genera un debate entre las ansias de progreso y una idiosincrasia conservadora.

La temporada de verano anterior otorgó un balance económico negativo y el comercio sufrió una merma de ingresos considerable este invierno, potenciado con los tarifazos de luz y gas. Esto abre un panorama incierto de cara al próximo verano.

La comuna ya apunta a distintas estrategias puntuales para tentar la llegada de visitantes, sabiendo que la competencia con otras ciudades costeras no será fácil. Por eso, buscarán afianzar el dialogo con los sectores privados haciendo hincapié sobre la relación de tarifas y prestación de servicios, algo que siempre genera rispideces pero en lo que ahora debe ahondarse aún mucho más.

Parque Industrial

El Sector Industrial Planificado, es un objetivo que persigue insistentemente el municipio de General Alvarado, pero sigue retrasado por la falta de habilitación desde el gobierno de la provincia. Si bien se firmaron convenios para que distintas empresas se radiquen en el barrio Aeroparque, aún existen trámites burocráticos pendientes que no permiten avanzar mucho más. Igualmente, el anhelo es poder destrabar la situación antes de fin de año.

Historia

Lo que se conoce actualmente como Miramar, se lo identificó originalmente a un establecimiento de campo llamado “El Saboyardo”, el cual era propiedad de Fortunato de la Plaza.

Justamente esta personaje que terminaría siendo fundamental en el futuro de la localidad, tenía como cuñado a José María Dupuy, con gran conocimiento geográfico del sector de playas, además de ser un estudioso que seguía muy de cerca el crecimiento de Mar del Plata.

Ambos compartían el pensamiento de fundar un pueblo balneario en estas costas mientras transcurría el año 1887.

Ese mismo año, el Ingeniero Rómulo Otamendi y el agrimensor Eugenio Moy, ayudados por el propio Dupuy, e inspirados en las normas urbanísticas de La Plata, realizaron los planos que dirigirían la creación de la anhelada villa balnearia.

Sólo algunos meses tardaron en comenzar las primeras edificaciones, y para 1890 Miramar ya contaba con una escuela, Juzgado de Paz, iglesia en construcción, un hotel y 860 habitantes. Lentamente, la incorporación de servicios la iría convirtiendo en un sitio turístico tal y como había sido previsto por sus fundadores.

El primer balneario surgió en 1905 y consistía en una casilla de madera que su propietario trasladaba diariamente desde las barrancas hasta la orilla del mar.

En 1911, se produjo una verdadera revolución con la llegada del ferrocarril, en donde un aluvión de visitantes invadió la ciudad para consolidar a partir de ese momento la actividad turística.